Al menos diez civiles murieron hoy, entre ellos tres menores y dos mujeres, una de ellas embarazada, por la caída de cohetes y bombardeos de supuestos aviones rusos en las inmediaciones de un hospital y en otras zonas del norte de la provincia siria de Alepo.

Al menos diez civiles murieron hoy, entre ellos tres menores y dos mujeres, una de ellas embarazada, por la caída de cohetes y bombardeos de supuestos aviones rusos en las inmediaciones de un hospital y en otras zonas del norte de la provincia siria de Alepo.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos precisó que los ataques tuvieron como blanco los alrededores del hospital de la localidad siria de Azaz, fronteriza con Turquía, así como partes del vecino pueblo de Kalyibrín.

Azaz se encuentra bajo el control del Frente del Levante, la principal alianza armada de la provincia de Alepo y en la que está incluida el Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda.

El bombardeo cerca del hospital de Azaz es el segundo ataque contra una instalación sanitaria en Siria durante la jornada de hoy.

Anteriormente, el Observatorio informó de al menos nueve fallecidos y decenas de heridos y desaparecidos por un supuesto bombardeo de la fuerza aérea de Rusia contra un hospital respaldado por Médicos Sin Fronteras (MSF) en la urbe de Maarat al Nuaman, en la provincia septentrional de Idleb.

MSF confirmó en un tuit que ocho trabajadores del centro, que fue golpeado por cuatro cohetes, están desaparecidos.

No es la primera vez que una instalación médica que recibe apoyo de MSF es atacada en Siria.

El pasado 5 de febrero, tres personas murieron y otras seis, entre ellas una enfermera, resultaron heridas por un bombardeo contra el hospital de Tafas, en el sur de Siria y ayudado por la ONG.

Siria sufre desde hace casi cinco años un conflicto que se ha cobrado las vidas de más de 260.000 personas, según el recuento del Observatorio.