Fluminense y Boca Juniors se enfrentaron en la final de la Copa Libertadores disputado en el estadio Maracaná de Brasil.
La escuadra brasileña llegaba con un ligero favoritismo debido a su juego vertical, apoyado en los goles de Germán Cano que cosechaba 12 tantos previo al duelo ante los argentinos.
Por su parte, los visitantes eran más dependientes de sus individualidades, sobre todo la de su arquero Sergio Chiquito Romero que venía siendo figura en tandas de penales.
Ya en cancha, el Flu impuso su juego desde la intensidad, buscando activar las bandas para forzar los duelos ofensivos de Jhon Arias y Keno.
La insistencia brasileña le permitió encontrar el 1-0 por medio de Cano quien remató dentro del área, para poner justicia en lo que se venía desarrollando el partido.
Ya en la segunda mitad, Boca Juniors tuvo que arriesgar, adelantando líneas, teniendo en Luis Advíncula su lateral más profundo.
El gol del empate cayó al minuto 72 del partido, tras sacar un fuerte remate cruzado para igualar la situaciones y meter a Boca Juniors en el partido.
El duelo no se movió y se tuvo que resolver en los adicionales, donde inicialmente Kennedy puso el 2-1 por medio un tremendo remate desde fuera del área para darle el triunfo local, sin embargo, Kennedy fue expulsado por doble tarjeta amarilla pro su celebración, dejando al Flu con 10 jugadores.
Finalmente, Fluminense se proclamó campeón por primera vez en su historia de la Copa Libertadores, y ahora enfrentará a Liga de Quito por la Recopa Sudamericana.
Fuente: Ecuavisa