El Ministerio señaló que tras meses de investigación, esta madrugada se efectuó una operación en la que participaron más de 200 policías en varias ciudades del país y se logró la detención de quince personas, entre ellas cinco agentes en activo, uno de los cuales al parecer es el líder de la banda.
Según los informes preliminares, la presunta banda estaba dedicada a cometer robos a domicilios y personas, a dotar de armas a otros grupos delictivos, a la extorsión y otros delitos.
En la operación, denominada «Zeus», la Policía se incautó de dos escopetas, una carabina, una pistola, un revólver, dos ballestas, un fusil de aire comprimido, un equipo de visión nocturna, 22.000 dólares en efectivo, dos chalecos antibalas y cuatro vehículos, entre otras evidencias.
El operativo se desarrolló en las ciudades de Quito, Guayaquil, Santo Domingo de los Tsáchilas, Olmedo, Portoviejo, Paján, Montecristi y Manta.
El ministro del Interior, José Serrano, dijo que la presunta organización tenía su campo de acción en las provincias de Manabí, Guayas y Pichincha y señaló al policía en servicio activo Diego Armando B.B., como supuesto líder de la banda.
«A través de la información que manejaba el cabo, los integrantes de este grupo de antisociales asaltaban domicilios, después llegaba el uniformado y les decía a las víctimas que no denuncien el hecho, porque la banda es muy peligrosa», contó el ministro.
«Es una vergüenza para la institución» que un agente esté involucrado en estos delitos, pero la operación fue importante «porque nos permitió desarticular esta estructura», añadió Serrano, al asegurar que la investigación nació de la propia institución.
«No vamos a permitir que un solo miembro más de la Policía esté involucrado en estas estructuras», dijo Serrano y aseguró que en los próximos días serán desvinculados de la institución 35 agentes que han sido detenidos por varios delitos.
«El gran objetivo es tener una de las mejores Policías de América y el mundo», apuntó el ministro.
