Para hoy está prevista la reapertura de la rampa 3 del intercambiador que se construye a la altura del barrio Carapungo (en el norte de Quito). El paso deprimido conecta de norte-sur la Panamericana con la avenida Simón Bolívar. Esta es la segunda vez en los últimos 4 meses y medio que el viaducto, una de las 6 conexiones que tendrá la obra, es habilitado.
El 29 de diciembre pasado se habilitó, por primera vez, la circulación vehicular. La medida duró hasta la segunda semana de marzo, cuando el paso fue cerrado para la realización de trabajos pendientes. Durante un recorrido la semana pasada, el alcalde Mauricio Rodas señaló que la obra del intercambiador registra un avance de 70% y que se espera funcione completamente en el segundo semestre de este año.
Este es el segundo aplazamiento que tiene la obra. El 8 de mayo del año anterior, Rodas señaló que se redoblarían esfuerzos “para entregar esta obra que tendrá un costo de $ 20’500.000 y que beneficiará a cerca de 300.000 habitantes a fines de diciembre de 2015”. No obstante, el gerente de la empresa municipal de obras, Alejandro Larrea, aseguró durante la habilitación de la rampa 3 a fines de diciembre, que el total del intercambiador concluiría el primer semestre de 2016. Larrea lo ratificó cuando anunció el cierre de la rampa 3 por 10 semanas.
En declaraciones a EL TELÉGRAFO dijo que la obra concluiría a finales de junio. Entre tanto, desde el 26 de abril está cerrado temporalmente un tramo de la Panamericana Norte, desde la Giovanny Calles hasta el inicio del intercambiador, para que avance la construción. La restricción concluiría la primera semana de julio. Los trabajos que se ejecutan corresponden a la edificación de los muros para el paso elevado del intercambiador; adicionalmente se completan trabajos de alcantarillado y soterramiento, además del ingreso a La Bota.
