La ministra coordinadora de Desarrollo Social (MCDS), Gabriela Rosero, explicó que el Registro Único de Damnificados (RUD) es un instrumento que permite focalizar de mejor manera todas las acciones y programas que el Gobierno Nacional impulsa para avanzar en la reconstrucción de las zonas afectadas por el terremoto del 16 de abril. “Todas las acciones emprendidas buscan rehabilitar la infraestructura mientras se facilita, a la vez, la recuperación de los medios de vida de los damnificados” aseguró la funcionaria.
La Ministra dijo que la gestión de la política social frente al desastre incluyó: la evaluación de daños, pérdidas y costos que dejó el terremoto; la estabilización de los medios de vida de los afectados; la rehabilitación de infraestructura social y comunitaria; la protección a la población vulnerable, así como el trabajo emergente y el restablecimiento del empleo. “Nuestro objetivo fundamental es reducir el número de personas damnificadas que se encuentran en los 23 albergues oficiales” agregó.
De su parte, el director del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), mencionó que el RUD, es decir la base de datos, consolidada y unificada, de los hogares que fueron afectados por el terremoto, culminará este 30 de junio. “El RUD incluye información sobre la magnitud de las afectaciones en las zonas afectadas, las principales necesidades de las personas damnificadas y el universo de posibles beneficiarios a programas sociales”, explicó el funcionario, tras detallar que en la primera fase del RUD, que culminó el 31 de mayo, se registraron 5.824 familias (23.155 personas); en la segunda fase, que terminará de validarse el 8 de junio, se registró un estimado de 40.000 hogares; y la tercera fase, que actualmente sigue vigente, incluirá beneficiarios hasta este 30 de junio.
La Ministra puntualizó que se considera como damnificado a “aquella persona que sufrió la pérdida de un familiar que era el sostén económico de su hogar; o a aquellos que perdieron su vivienda o medio de subsistencia en el terremoto”. Además, debido a la importancia de la recuperación de los medios de vida en las zonas del desastre, se expuso los principales incentivos socioeconómicos que actualmente ofrece el Gobierno a los afectados, entre los cuales están los bonos de reconstrucción de viviendas, de alimentación, de pago a las familias acogientes y de arriendo para los damnificados. “El pago de los distintos bonos ya está habilitado. Aquellas familias que están incluidas en bonos de acogida ya cobraron el incentivo correspondiente” puntualizó la titular del MCDS.
Al final informó que los gastos de reconstrucción, en el caso de la infraestructura del sector social, bordean los 1.369 millones de dólares. Aseveró que se están tomando acciones inmediatas para iniciar el proceso de reconstrucción y que mientras tanto los diversos servicios sociales siguen activos dentro de albergues o espacios temporales.