Trump dijo en el Pentágono que está «estableciendo nuevas medidas de revisión para impedir que los terroristas islámicos radicales entren a Estados Unidos. No los queremos aquí. Queremos asegurarnos de que no estemos admitiendo en nuestro país las mismas amenazas que nuestros soldados combaten en el extranjero. Solo queremos admitir el ingreso de quieres apoyen nuestro país y amen profundamente a nuestro pueblo».
Trump además suspendió por 90 días la entrada de personas de siete países mayoritariamente musulmanes: Siria, Irán, Iraq, Libia, Somalia, Sudán y Yemen.
La orden también le da al Departamento de Seguridad Nacional el margen de maniobra para dar prioridad a las solicitudes de refugio hechas por personas «sobre la base de la persecución basada en la religión» siempre y cuando la persona que solicita el estatuto de refugiado sea de «una religión minoritaria en el país de nacionalidad del individuo».
Eso les facilitaría a los cristianos y a otras minorías religiosas en países de mayorías musulmanas entrar a EE.UU. en comparación con los musulmanes en general.
MIRA: Las promesas de Trump: ¿cuáles son y cuáles ha cumplido?
Donald Trump visitó el Pentágono para la juramentación de James Mattis como secretario de Defensa y allí firmó los decretos para reducir el flujo de refugiados a los EE.UU. y otras acciones concernientes a la reconstrucción de las fuerzas armadas.
Donald Trump dijo recientemente que era partidario de técnicas de interrogatorio como el ‘waterboarding’, pero en conferencia de prensa en su encuentro con la primer ministra de Reino Unido señaló que Mattis, «no necesariamente cree en la tortura o como quiera definirlo».
«Él va poder anularlo porque le estoy dando ese poder», dijo Trump.
