Los datos de la Superintendencia de Compañías registran un aumento en el número de empresas disueltas en los dos últimos años. En 2015, las compañías disueltas fueron 1.341 mientras que en 2016 esa cifra aumentó a 7.641; es decir, 6.300 compañías más fueron disueltas el año pasado.

La Cámara de Comercio de Quito realizó un estudio de estas cifras. Para su presidente ejecutivo, Patricio Alarcón, el aumento de empresas disueltas se debe a la recesión económica.

“La economía no va bien, el consumo no está permitiendo que las empresas vendan más, es un año de crisis”, aseguró Alarcón.

Por su parte, el ministro de Industrias, Santiago León afirmó que una empresa disuelta no significa que haya quebrado o cerrado. Añadió que la disolución es un acto administrativo que se pudo presentar hace muchos años atrás.