La compañía Ethiopian Airlines anunció hoy que dará inicio a las investigaciones pertinentes para esclarecer las causas del accidente aéreo que este domingo causó la muerte de 157 personas de 35 nacionalidades en Etiopía.

Accidente aéreo en Etiopía/ Crédito: EFE

«El comité (de investigación) estará formado por miembros de la aerolínea, representantes de la Autoridad de aviación civil y de Transportes del Gobierno etíope», indicó Ethiopian en un comunicado, en el que también involucró a la compañía estadounidense Boeing, fabricante de la aeronave, y a entidades internacionales.

Este equipo formado por «todas las partes interesadas» tendrá como cometido realizar la investigación forense y la identificación de las víctimas, cuyos restos serán entregados después a sus familiares.

Entre las víctimas mortales figuran dos ciudadanos españoles, nueve etíopes, 32 kenianos, cinco alemanes, 18 canadienses, siete franceses, siete británicos, dos marroquíes, dos israelíes, ocho chinos, ocho estadounidenses, un nepalí, un yemení y un nigeriano, entre otros.

Al menos 19 de estos pasajeros eran trabajadores de alguna agencia de las Naciones Unidas, muchos de los cuales se dirigían a Nairobi para asistir mañana a la IV Asamblea de la ONU para el Medioambiente (UNEA-4), donde más de 5.000 representantes de 193 países intentarán trazar la ruta hacia una economía más sostenible.

Todavía no está claro qué causó el accidente del Boeing 737-8 Max, que se estrelló esta mañana a unos 42 kilómetros al sudeste de Adís Abeba tras seis minutos de vuelo, si bien el pilotó reportó «dificultades» y solicitó regresar al aeropuerto etíope, lo que le fue concedido.

La página de rastreo de tráfico aéreo a tiempo real, la sueca Flightradar24, apuntó en un mensaje de Twitter que la aeronave accidentada se desplazó a «una velocidad vertical inestable» tras el despegue.

El primer ministro etíope, el reformista Abiy Ahdmed -en el poder desde abril de 2018-, se desplazó hasta el lugar del accidente, donde expresó su «profunda tristeza» y adelantó que se llevaría a cabo una «investigación completa y oportuna».

En octubre de 2018, otro avión Boeing 737-8 Max de la compañía indonesia Lion Air se hundió en el mar de Java doce minutos después de despegar de Yakarta, lo que causó la muerte de 189 personas.

Según una de las cajas negras de la aeronave, el suceso se vio motivado por fallos en el sistema automático, algo que se había repetido en otros vuelos y que la compañía aseguró haber solventado.

Ethiopian Airlines es la mayor aerolínea de África, con numerosos vuelos no solo a destinos internacionales sino dentro del propio continente, y con una muy buena reputación de seguridad aérea.

El último accidente registrado de esta compañía sucedió el 25 de enero de 2010, cuando un Boeing 737-800 cayó en el mar Mediterráneo, poco después de haber iniciado su viaje desde Beirut a Adís Abeba, lo que provocó la muerte de 90 personas.