La cabo Angélica Martínez tendrá tres días de descanso tras la agresión que sufrió en el sector Sosote, en la vía Portoviejo - Crucita, en Manabí. El hecho ocurrió a las 02:00 del domingo 8 de abril.

El Telégrafo

La vigilante participaba en un operativo para controlar que personas ebrias no condujeran. Durante la jornada, le solicitó a un chofer de un auto que se detuviera y al acercarse percibió el olor a licor en el vehículo. «Le dijo al conductor que saliera y lo llevó hasta la patrulla.

Cuando estaba en calidad de detenido, los otros cuatro acompañantes lo sacaron a la fuerza», informó este lunes 9 de abril José Gálvez, director de la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE). Martínez, para evitar que escaparan, corrió hacia el vehículo y metió su cuerpo por la ventana para extraer las llaves del sistema de encendido.

Sin embargo, no lo logró y quien iba al volante aceleró sin importarle que ella iba colgada.