A pesar de que los reinados siempre han estado ligados a la idea de belleza e imagen, en Quito año a año se elige a una soberana que demuestra, con obra social, que un certamen va más allá de una cara bonita y un buen cuerpo.

Centro Terapeútico Aprendiendo a Vivir
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Por: Priscila Romero 

Desde 1998, su trabajo se plasma en el Centro Terapéutico Aprendiendo a Vivir que fue creado durante la gestión de la Reina de Quito de ese entonces, Ana María Serrano.

Como se señala en la plataforma web de la Fundación Reina de Quito, el Centro “reúne a un amplio grupo de niños, niñas y jóvenes con Síndrome de Down, sus familias, un calificado equipo de profesionales y un grupo de voluntarias, que trabajan en conjunto para que los niños alcancen de forma integral, su inclusión al medio familiar, escolar y social, con total autonomía e independencia.” 

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Centro Terapéutico «Aprendiendo a Vivir»/ Crédito: Fundación Reina de Quito

Sonia Hinostroza, Directora Administrativa nos comentó que el trabajo en el Centro, a través de la Fundación, es destacable pues se diferencia al trabajo de otras fundaciones en el país.

Con alrededor de 115 niños a su cargo, el Centro Terapéutico se encarga de brindarles lo necesario en cuanto a su desarrollo de aprendizaje. A través de terapias de lenguaje, psicológicas y asesorías en su camino del Síndrome de Down, el Centro se vuelve un hogar para los padres y niños con lo conforman cada año.

El trabajo de una Reina de Quito es gestionar con instituciones públicas y privadas lo que el Centro necesita en materia logística. Ella, no solo con su imagen sino con su gestión de 365 días tiene un camino largo por recorrer para continuar con esta labor que ya tiene más de 21 años en la ciudad.

Datos:

Según cifras publicadas por el Genetista Milton Jijón en el portal Redacción Médica, en Ecuador, el síndrome de Down ocurre en 1 de cada 550 nacidos vivos, promedio mucho mayor a la tasa mundial que es 1 de cada 700. A nivel general, las mujeres mayores a 35 años son propensas a tener hijos con este síndrome.