Este domingo Latinoamérica se enteró de la muerte del expresidente (1989-1999) argentino Carlos Menem, quien fue uno de los referentes políticos de la región en los 90, aunque sus administraciones estuvieron también marcadas por las polémicas.

Flickr

Posteriormente a su salida del cargo enfrentó un caso que lo ligaba con el tráfico de armas en Ecuador y en Croacia, ambos por hechos ocurridos en la primera mitad de la década de 1990.

De acuerdo con las autoridades argentinas, durante el Gobierno de Menem se exportaron 6.500 toneladas de armamento destinado oficialmente a Panamá y Venezuela, pero que fue desviado a Croacia, en 1991, en pleno conflicto de la antigua Yugoslavia, y a Ecuador, en 1995, en medio de un enfrentamiento bélico con Perú por un antiguo litigio limítrofe.

Ambos países habían recibido municiones, cañones y fusiles producidos por Fabricaciones Militares de Argentina.

El exmandatario peronista estuvo en arresto domiciliario por casi seis meses por este caso en 2001, pero fue dejado en libertad por un fallo favorable de la Corte Suprema de Justicia.

Sin embargo, la suerte de Menem cambió cuando el expresidente Néstor Kirchner (2003-2007) -también peronista- hizo cambios en el máximo tribunal y la causa de la venta ilegal de armas fue reabierta.

Esto ocasionó que luego fuera sentenciado a siete años de cárcel en 2013 por el tráfico de armas, delito que significó una violación a tratados internacionales de la época en que se dieron, puesto que Argentina era garante de paz en el caso de los dos países sudamericanos, mientras que Naciones Unidas había impuesto un embargo a la venta de armas en los Balcanes.

Dicha sentencia fue ratificada por un tribunal de casación en 2017, pero la máxima corte devolvió el caso a casación, a una sala distinta, donde finalmente en 2018 fue absuelto, recuerda El País. Los jueces alegaron que la demora de una sentencia por más de 23 años había superado el “plazo razonable” para que tenga un juicio justo. Aunque medios argentinos señalaron en ese momento que la causa no podía prescribir porque él todavía seguía siendo un funcionario como legislador.

Además, mientras se definía su caso, la Corte Suprema le permitió en 2016, ya sentenciado, volver participar en elecciones, con lo que logró mantenerse como senador por la provincia de La Rioja desde 2005 hasta su muerte. Por los fueros de este cargo Menem nunca pisó la cárcel.

Nota Original: El Universo – LINK