El Comité de Protección para Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) considera que Ecuador puede pasar de ser uno de los países más restrictivos para el ejercicio de periodistas en un referente regional del respeto a la libertad de prensa.

El Telégrafo

La entidad presentará este jueves 12 de julio su evaluación de cómo ha cambiado el escenario de trabajo de los comunicadores en este último año. Un avance de este estudio lo dio este 10 de julio la representante de este organismo, Natalie Southwick, en la Comisión de Derechos Colectivos de la Asamblea. Allí se debate la reforma a la Ley Orgánica de Comunicación.

Southwick sostuvo que los reporteros tienen hoy mejores condiciones para realizar su trabajo, pero todavía existe la incertidumbre de que la estructura institucional y legal que fue usada para sancionar a medios de comunicación se mantenga en la Ley de Comunicación.

Ella recordó que en marzo pasado visitó al presidente Lenín Moreno y conversó con él sobre la necesidad de cambios legales que permitan un ejercicio sin restricciones a los comunicadores.

“El Presidente cumplió con sus promesas”, dijo Southwick. Por eso, manifestó, es fundamental que se concreten cambios en la Ley de Comunicación. Los más importantes, a su parecer, son la eliminación de la Superintendencia de Comunicación, la supresión de la figura de linchamiento mediático y la eliminación de la censura previa.

Esos tres puntos son parte del proyecto de reforma a la Ley de Comunicación que presentó el Ejecutivo. Esa es una de las 12 propuestas que llegaron a la Comisión de Derechos Colectivos. La asambleísta Soledad Buendía (Revolución Ciudadana), quien participó en la sesión de la Comisión de Derechos Colectivos, defendió la comunicación como un servicio público, lo que garantiza, dijo, los derechos de los ciudadanos.

También recalcó que la figura del linchamiento mediático debe ser reformada pero no eliminada. Para la catedrática de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, Palmira Chavero, debe existir una instancia que regule las prácticas de comunicación. “La autorregulación no funciona”.