Para conseguir que tu empresa prospere necesitas empleados satisfechos con su trabajo. Conseguirlo implica asegurar un buen clima laboral, para lo que hay que tener en cuenta multitud de detalles, empezando por factores físicos como la iluminación o la organización del espacio.

Un contacto directo con tus trabajadores agradeciéndoles su trabajo son pequeños detalles que sin suponer un gran esfuerzo ayuda a la obtención de un buen clima laboral. Créditos: ShutterStock