Representantes de la Confederación de Nacionalidades Indígenas y el Ministerio de Inclusión Económica y Social (Mies) firmaron un convenio mediante el cual la Conaie puede utilizar su sede, por 100 años más.

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El acto se hizo en la Casa de Sucre ubicada en el centro histórico, este 10 de agosto del 2017. Participaron el ministro de Inclusión Económica y Social, Iván Espinel y el presidente de la Conaie, Jorge Herrera.

La abogada Jessica Fuenmayor dio lectura al convenio, en el que se señala que la Conaie podrá hacer uso y goce de la sede para sus actividades de fortalecimiento. Este permite además realizar actividades políticas, cosa que no se había incluido en el comodato anterior.

Herrera expresó su satisfacción con la firma del contrato. Espinel afirmó que este es un gran paso en la historia. «El presidente Moreno le está diciendo al país: hay que unificarse extendiendo la mano y una gran muestra es la firma de este convenio».

Carlos Pérez Guartambel, presidente de la Confederación de Pueblos de la Nacionalidad Kichwa (Ecuarunari), había manifestado con anterioridad su posición en torno a la sede. «Pueden dar el uso para 1000 años que igual viene otro gobierno y lo retira, la casa debe entregarse con escrituras. Sí la Conaie acepta el convenio ya es bajo su responsabilidad».

Herrera explicó que sí se intentó conseguir las escrituras de la casa, sin embargo el Gobierno supo explicarle que jurídicamente había una prohibición con los bienes de Estado y por esta razón no se podía hacer un proceso de entrega. A pesar de esto, la Conaie considera que esto abre una posibilidad de acercamiento entre el Gobierno y el movimiento indígena.

El acto terminó con el agradecimiento a todos los asistentes. Los antecedentes La Conaie recibió la casa ubicada en las 6 de Diciembre y Granados, luego de un levantamiento indígena producido en 1991 durante el gobierno de Rodrigo Borja.

El 11 de diciembre de 2014, el expresidente Rafael Correa, decidió retirar el comodato de la casa. Por más de 23 años la Conaie había ocupado el edificio de 3 pisos y ahora debían desalojarla en 15 días.

Según el gobierno de ese entonces se necesitaban edificaciones para convertirlas en casa de alojamiento para jóvenes sin familia que acababan de salir de las drogas.

Fuente: El Comercio