El Año Nuevo comenzó de la misma y amarga manera que había terminado 2016: marcado por el terror y la muerte. Centenares de personas se habían reunido a celebrar el cambio de año en el boliche Reina, del barrio de moda Ortaköy, situado a orillas del Bósforo, en Turquía. En ese escenario, la fiesta se tornó en masacre: por lo menos un hombre abrió fuego y dejó hasta el momento 39 muertos.

CNN

El 2017 inició salpicado por el terrorismo, que se ensañó nuevamente con Turquía, donde un ataque perpetrado la noche de Año Nuevo en un bar de Estambul dejó al menos 39 personas muertas y otras 69 heridas, en su mayoría turistas extranjeros de naciones musulmanas. Como en ataques anteriores, el grupo Estado Islámico se atribuyó el mismo, y aseguró que es en respuesta a las operaciones militares turcas contra la agrupación en el norte de Siria.

A partir del atentado, la Policía turca ha detenido a 27 presuntos miembros del grupo terrorista en la provincia de Izmir por su supuesta vinculación con el ataque en el club Reina el 1 de enero.

Según el diario Hürriyet, los arrestados, entre ellos varios menores, pertenecen a tres familias de Asia Central que supuestamente convivían con el atacante en la ciudad de Konya, en el centro de Turquía, y que habían huido de sus hogares tras el atentado.

La unidad antiterrorista llevó a cabo una redada en cuatro domicilios de Izmir, y según los servicios de seguridad, la operación continúa. Otras 16 personas fueron detenidas en Estambul y en Konya entre el 1 y el 3 de enero.

El agresor, cuya identidad las autoridades afirmaron conocer aunque no divulgaron, sigue prófugo de la Justicia. Entre los detenidos está la mujer del atacante, que declaró a la Policía no saber que su marido pertenecía al EI.

«La persona que cometió el atentado terrorista de Estambul fue identificado», declaró Mevlüt Cavusoglu a la agencia de prensa progubernamental Anadolu en una entrevista televisada.

Asimismo, otra respuesta inmediata  del Gobierno turco fue ejecutado por su Ejército, quien asestó un fuerte golpe al Estado Islámico en Siria al atacar 100 posiciones yihadistas en el norte del país.

Imágenes satelitales mostraron aviones de guerra lanzando cohetes cerca de los pueblos de Al Bab, Tadif y Bzagah. Como saldo de los operativos, fueron abatidos 22 terroristas y decenas de edificios terminaron destruidos.

Alrededor de 300 personas murieron en 2016 en distintos atentados cometidos en Turquía por el autodenominado Estado Islámico (EI) o por el grupo armado Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).

La policía turca ha atribuido al EI varios atentados en Estambul contra intereses turístico, como fue el ataque al Aeropuerto internacional Atatürk que causó 45 muertos el pasado junio.