La muerte de Fidel Castro plantea ahora el dilema entre una transición ordenada sin revancha o un colapso que generaría violencia, impediría la reconstrucción y provocaría la migración de millones de cubanos.

Cubadebate

Francisco Correa, periodista del Diario de Cuba y corresponsal de la Agencia Independiente Hablemos Press en La Habana, en FM MUNDO manifestó que después de la muerte del expresidente Fidel Castro, el pasado viernes, en la isla se respira un ambiente de duelo, consternación e incertidumbre.

Y precisamente, para el periodista, este último punto es el que más preocupa porque se prevé en lo político que siga un partido único en el poder y todavía no existan elecciones libres y democráticas. «Entre los cubanos hay muy pocas expectativas de que existan cambios en el nivel de vida después del deceso de Castro. Hay una política trazada en los personajes que le sucederán en el poder a su hermano Raúl Castro», comentó.

De su lado, Yoani Sánchez, periodista cubana que denunció al gobierno castrista mediante su blog Generación y luego con el diario digital 14ymedio.com, afirmó que Raúl Castro, actual presidente de Cuba, se quedó huérfano tras la muerte de su hermano pues no conocía una vida sin él. «No había tomado una decisión sin razonar qué pensaría sobre sus decisiones, nunca dio un paso sin la mirada en el hombro que lo juzgaba e impulsaba. El silencio se extiende, es madrugada, pero el miedo se palpa en el aire. Vienen días complicados», tuiteó el día de la muerte de Fidel Castro.

Entonces, la pregunta es; ¿Qué va a pasar en Cuba con la muerte de Fidel Castro?. Para Michael Shifter, presidente de Inter-American Dialogue  con la muerte del líder de la Revolución Cubana la situación política y económica probablemente se abrirá, y le quitará un peso a Raúl. «El no tendrá que preocuparse más por las contradicciones con su hermano mayor, una personalidad avasalladora», dijo en entrevista para AFP.

Aseguró, además, que los cubanos ya enterraron hace tiempo a Fidel y ellos, afirmó, tienen la cabeza puesta en el futuro. «Para muchos no es más que un glorioso recuerdo», agregó.

Asimismo, Arturo López Levy, especialista en asuntos cubanos del Centro de Estudios Globales de la Universidad de Nueva York, también en AFP, aseguró que después de la muerte de Fidel, ganarán ímpetu la reforma orientada al mercado y la erradicación de las políticas comunistas más impracticables.

«Sin el carisma de Fidel, las disposiciones del Partido Comunista descansarán en los resultados económicos», dijo el analista, quien acotó que lo post-Fidel comenzó en 2006, lo que cuenta en adelante es lo post-Raúl, aseguró.

El cambio de la política en Cuba, además, podría estar encaminada por presiones externas y la principal es la que ejerce desde ya el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, quien amenazó este lunes con poner fin al acercamiento entre Estados Unidos y la isla, a no ser que La Habana haga concesiones en temas de derechos humanos y la apertura de su economía.

«Si Cuba no está dispuesta a alcanzar un mejor acuerdo para el pueblo cubano, con los cubano-estadounidenses y Estados Unidos como un todo, pondré fin al acuerdo», escribió Trump en su cuenta de Twitter.

El mensaje de Trump llega un día después de que uno de sus principales asesores prometió buscar un «mejor acuerdo» con el gobierno cubano y tras conocerse la muerte del líder comunista cubano Fidel Castro el viernes, a los 90 años.

«Tenemos que tener un mejor acuerdo», dijo el jefe de gabinete, Reince Priebus, el domingo al canal Fox. Tras criticar que la administración de Barack Obama ha hecho muchas concesiones con La Habana, Priebus no explicó cómo se modificaría el histórico acercamiento entre ambos países iniciado el 17 de diciembre de 2014 por el presidente saliente y su homólogo cubano Raúl Castro.