La pistola Pietro Beretta y una alimentadora cargada con siete balas estaban ocultas junto a la palanca de cambios de un vehículo. En ese compartimento se depositaron también cuatro celulares.

El Telégrafo

El nerviosismo del conductor y de los dos pasajeros alertó a los policías. Según documentos judiciales, la tarde del 17 de julio pasado, los agentes detuvieron la marcha del auto para realizar un control de rutina, en la vía Esmeraldas-Rioverde, cerca de la frontera norte. Tras hallar el arma automática, los tres ocupantes del vehículo quedaron detenidos. Entre ellos estaba alias ‘Tarci’, miembro de la supuesta organización delictiva que proveía de armas militares a ‘Guacho’. El pasado miércoles, ‘Tarci’, de 34 años, fue detenido de nuevo en Esmeraldas. En esta operación, denominada Camaleón, la Policía arrestó a siete militares y siete civiles, aunque luego fue liberado un civil.

Esta vez, alias ‘Tarci’ quedó con prisión preventiva, tras ser acusado por delincuencia organizada y tráfico de armas. En julio, en cambio, pasó 24 horas en la cárcel. De acuerdo con el expediente que consta en el sistema judicial, la Fiscalía se abstuvo de presentar cargos en su contra por la tenencia de una pistola Pietro Beretta. Ese modelo es usado como arma de dotación para las FF.AA y la Policía. Ese tipo de arma también la pueden adquirir quienes cuentan con el permiso de la Dirección de Control de Armas.

En julio, ‘Tarci’ y los dos ocupantes del vehículo portaban el arma de forma ilegal. Uno de ellos, identificado como Julián Candelo Orobio, aceptó ser el dueño. Ante un juez de flagrancia dijo que había traído la pistola desde su natal Cali, en Colombia, y que la quería “regalar” en Ecuador. “No era para cometer ilícitos”, agregó, pero no explicó por qué la llevaba cargada. Tras aceptar su responsabilidad, ‘Tarci’ quedó libre, pero el extranjero fue sentenciado a tres años de cárcel.

Fuente: El Comercio Nota Original LINK