Las inundaciones y los corrimientos de tierras por las intensas lluvias caídas en el oeste de Japón dejaron 199 muertos, anunció el jueves 12 de julio de 2018 un portavoz gubernamental.

Efe

Según el vocero, Yoshihide Suga, aún hay decenas de desaparecidos y las operaciones de búsqueda continúan, tras el peor desastre por causas meteorológicas en Japón en tres décadas.

El anterior balance era de 179 fallecidos. El primer ministro japonés, Shinzo Abe, que el miércoles visitó la provincia de Okayama, una de las zonas más afectadas, planea desplazarse el viernes a otra de las áreas golpeadas por las inundaciones y los corrimientos de tierra, indicó Suga.

Abe tuvo que cancelar una gira por cuatro países ante las consecuencias de este desastre. La esperanza de encontrar supervivientes se desavanecieron, una semana después del inicio de las lluvias, incluso aunque ya hayan cesado los aguaceros y las aguas hayan retrocedido. Al menos 10 000 personas que evacuaron sus hogares o fueron rescatadas viven ahora en refugios, y el gobierno prometió poner un fondo de emergencia a su disposición para ayudarlos a regresar a sus hogares.

“Haremos todo lo que podamos para que la gente no tenga que seguir viviendo en condiciones incómodas en refugios”, dijo Abe.