En NotiMundo Estelar, David Ruales, subdirector general del IESS, explicó que para solucionar la crisis del fondo de pensiones, se han implementado medidas estructurales; como, la aplicación de un modelo de salud, la desvinculación de personal, entre otros.

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A finales del 2019, el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) presentó el informe actuarial del Fondo de Invalidez, Vejez y Muerte. En este documento, se establece que si el Estado cumple con el pago del aporte del 40%, este fondo estaría cubierto hasta el 2053; de otra manera, se presentarían complicaciones desde 2023.

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David Ruales, subdirector general del IESS, explicó que aun cuando el aporte del Estado es vital, para poder sustentar el fondo de pensiones se necesitan una serie de acciones estructurales. «En este momento, es un problema de índole estructural que se fundamenta en la pirámide de crecimiento poblacional; porque hay un número mayor de la población activa que tiene varias necesidades que atender«.

Por este motivo, aseguró Ruales, esta institución se encuentra trabajando en la aplicación de una serie de medidas que permitan la optimización de los recursos y la reducción del gasto corriente. Por ejemplo, «en 2019, se prescindió de 1 900 funcionarios; además, se trabaja en la implementación de un modelo de salud«.

«El estado tiene un rol que cumplir aquí, pero, por otro lado, tanto el IESS como el BIESS deben optimizar el proceso de gestión y el gasto interno; de tal forma, que los ahorros que se produzcan en la gestión del Instituto puedan ser trasladados al banco, para que logre tasas de rendimiento superior al 6.25%«.

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