El Tribunal Penal, integrado por los jueces Luis Enríquez (ponente), Miguel Jurado y Marco Rodríguez, resolverá una nueva sentencia por peculado contra Raúl C., exministro del Deporte.

juicio_exministro_deporte_el_telegrafo
Exministro del deporte enfrenta nuevo juicio - Créditos: El telégrafo

En la Corte Nacional de Justicia (CNJ) se instaló ayer la audiencia de juzgamiento contra el exsecretario de Estado, esta vez por la subdivisión de contratos en obras deportivas para Río Verde, en Esmeraldas.

En este caso se encuentran procesados, además del exministro, Patricio S. y Fernando M., este último que se hizo conocido por haberse “comido” varios cheques en el momento que se dio el operativo de allanamiento en su domicilio, en diciembre de 2008.

Al inicio de la audiencia, Erwin Blum, abogado de Raúl C., solicitó la prescripción del delito, pero su petición fue negada por el Tribunal, porque este delito es imprescriptible. La fiscal general (e), Ruth Palacios, presentó como prueba a siete testigos para fortalecer su acusación contra los tres procesados en calidad de autores directos.

Édison Vizuete, Denisse Molina y Ramiro Jácome, exfuncionarios de la Contraloría que participaron en la elaboración del informe de responsabilidad penal sobre estos contratos, fueron tres de los testigos de Fiscalía. En sus intervenciones  recordaron las presuntas anomalías que se habrían cometido y las conclusiones a las que llegaron luego del examen especial realizado.

Erwin Blum, abogado del exministro, cuestionó el hecho de que sobre el supuesto peculado no se haya presentado una pericia contable, por lo que no se conoce el  monto del supuesto perjuicio al Estado. Raúl C., quien estuvo presente en la audiencia, evitó hablar con la prensa, pero estuvo atento a las intervenciones de los testigos y peritos.

Hasta el cierre de esta edición la audiencia continuaba. El exministro del Deporte tiene tres sentencias por peculado en su contra, de 4, 5 y 4 años de privación de  la libertad, así como otra de 5 años por tráfico de influencias.

Fuente: El Telégrafo – Nota Original: LINK