Cada 16 de octubre, se conmemora el Día Mundial de la Alimentación, Agustín Zimmermann, representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Ecuador, explicó que esta fecha busca visibilizar el problema de la alimentación.

Créditos: FAO Ecuador

Agustín Zimmermann, representante de FAO Ecuador, explicó que la situación actual a escala mundial, tiene un contraste profundo. 820 millones de personas padecen hambre. Y al mismo tiempo, millones de personas tienen sobrepeso crónico, debido a una alimentación deficiente, explicó.

Aseguró que la realidad alimentaria en Ecuador también está contrastada. Mientras que, el país tiene la segunda taza más alta de desnutrición crónica en América Latina y el Caribe. Es decir, 1 de cada 4 niños entre 0 a 5 años presenta talla baja. También, tiene una de las mayores tazas de sobrepeso y obesidad.

El representante de la FAO en Ecuador, aseguró que además de tomar conciencia, se debe modificar y transformar los sistemas agroalimentarios. Agregó que esto no sólo involucra a la política pública, sino, también envuelve al sector privado y a los ciudadanos que deciden qué alimentos consumen. Las personas deben tomar decisiones que reconozcan el efecto y el impacto que puede tener el tema del sobreconsumo y las porciones abundantes que se desperdician, agregó.

En relación a la desnutrición, explicó que la verdadera causa es que “niños y madres no tienen acceso a sanidad, agua potable. Puntualizó que “todos estos factores deben abordarse para tener un efecto en la reducción crónica infantil”.

“Los patrones de consumo en Ecuador y a nivel mundial, en realidad son totalmente insostenibles. No sólo porque se desperdician alimentos, sino por el impacto y responsabilidad que genera en el medio ambiente”, afirmó.

Zimmermann precisó que la FAO está contribuyendo con el país, para conocer el volumen real de pérdida y desperdicio de alimento. Hay alimentos suficientes para consumir, es una cuestión de acceso, aclaró.

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