Este domingo no fue la excepción. Decenas de miles de quiteños y extranjeros, en su mayoría asistentes al Habitat III, se volcaron hacia las calles del centro patrimonial de Quito atraídos básicamente por la Fiesta de la Luz.

La proyección e iluminación artística en grandes espacios y fachadas de las principales plazas, parques y edificaciones de la ciudad histórica ha concitado tanta expectativa que ha superado con creces lo que se esperaba por  parte del Municipio, que se esmera en la organización de los eventos extra cumbre Habitat III.

Según  explica Constance Gard, ejecutiva a cargo de la Fiesta de la Luz por la Secretaría de Cultura Del Municipio Metropolitano de Quito explica que en cada lugar cada artista expresa algo con música y luz, como medios de llegada, al fascinado público.

Lucía Devaurex, estudiante asistente al Habitat III, dijo estar muy feliz por la mezcla de arquitectura tan bella con la puesta de luz sobre la misma. Felicitó a la ciudad y cree que es un espectáculo que  en algunos aspectos supera al que se da en Lyon.

En San Blas las personas podían interactuar con los rayos de luz sobre sus cabezas emulando al universo. En la Plaza del Teatro la Fundación Teatro Nacional Sucre baño de luz de mil colores su fachada, al ritmo de Rapsodia Bohemia del grupo Queen y otros clásicos, ante un público maravillado que cada vez llegaba más y más. “Esto es maravilloso. Lo que ha hecho el alcalde está muy bello y adecuado para hacernos quedar bien ante el mundo” Dijo el arquitecto Fernando Núñez, mientras la argentina Emma Corcinni, dijo que  a pesar de estar cansada por todo el día de ponencias en el Habitat III, se felicitaba a si misma por haber ido a algo tan bello.

En la plaza de la Merced Jerome Donna y Simon Milleret-Godet en una compleja pero muy bella coreografía emulaban las bellezas del universo con centenares de lámparas dueñas de sus propias notas.

María Teresa León de Quito dijo: “Qué hermoso. La ciudad y el mundo se merecen esto. Estoy felicitando alcalde por la acertada iniciativa”.