La Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió a los países más ricos aportar con USD 16 000 millones para financiar el proyecto ‘Acelerador de Acceso a Herramientas COVID-19 para proporcionar a los países de medianos y bajos ingresos pruebas, tratamientos, vacunas y equipos de protección personal para poner fin a la pandemia como una emergencia mundial en el 2022.

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De acuerdo con un estimado de los especialistas se requiere un monto de hasta 23 mil millones de dólares para poner en marcha la estrategia de protección a naciones de bajos recursos, con el nivel más bajo en inmunización con un promedio de 5.79 por ciento de la población totalmente vacunada.

Por el momento, la OMS señala que se han administrado más de 4.700 millones de pruebas de covid-19 en todo el mundo desde el comienzo de la pandemia, sin embargo, solo se han administrado alrededor de 22 millones de pruebas en países de bajos ingresos, lo que representa solo el 0,4% del total mundial. Solo el 10% de las personas en países de bajos ingresos han recibido al menos una dosis de la vacuna.

En este sentido, la Organización Mundial de la Salud resaltó que cerrar la brecha entre los países permitirá crear un fondo común de vacunas contra la pandemia de 600 millones de dosis, apoyar la participación de la comunidad y cubrir los costos auxiliares de las donaciones, lo que contribuye a los objetivos nacionales de vacunación de los países hacia el propósito global de cobertura del 70% en todos los países a mediados de 2022.

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