El cuerpo de Brithany Morán, de 11 años, fue sepultado este miércoles 16 de mayo en el cementerio de la parroquia Pascuales, en Guayaquil. La niña tenía un mes como estudiante en el plantel que la atacaron.

El Telégrafo

El rector, vicerrector, inspector, un profesor y el personal del Departamento de Consejería Estudiantil (DECE) de un colegio público, de Guayaquil, son investigados administrativamente, tras la muerte de la estudiante Brithany Nicol Morán Samaniego, de 11 años.

La niña falleció el domingo 13 de mayo (Día de la Madre), después de dos días de, supuestamente, ser atada, amordazada y golpeada por cinco estudiantes dentro del salón de clases.

“Hemos iniciado los sumarios administrativos. No vamos a permitir que vuelva a suceder algo así. Vamos a sancionar”, manifestó  Éricka Laínez, subsecretaria de Educación.

La autoridad, durante el sepelio de la niña, a las 13:15 de este miércoles 16 de mayo, ofreció apoyo legal y psicológico a la familia de la menor, quien el 21 de julio hubiera cumplido 12 años. Reveló además el inicio del proceso de separación del plantel contra los menores implicados, cuatro mujeres y un varón, de 11 y 12 años.