Seguido de una caravana de decenas de vehículos y cientos de ciudadanos en las calles, el candidato oficialista Lenin Moreno recorrió este martes la provincia de Imbabura, en donde ratificó su compromiso de trabajar por las personas de la tercera edad y lograr la equidad en el país.

Agencia Andes

Durante un recorrido que duró más de dos horas entre Otavalo e Ibarra (sierra norte), un tramo que usualmente toma 40 minutos, el postulante por Alianza PAIS saludo a las decenas de ciudadanos que se apostaron en las calles para mostrarle su respaldo y aplaudir sus propuestas de campaña.

Mientras tanto, unas 4.000 personas, miembros de diferentes organizaciones sociales, vivían una fiesta y lo esperaban en el interior del coliseo Leoro Franco, en el centro de la ciudad.

Moreno arribó al lugar cerca de las 19:00 en medio de los aplausos de los asistentes.

En su discurso precisó que durante su gobierno se trabajará por la igualdad y se respetará la diversidad.

«Hoy es el día de la diversidad y no es para excluir, sino para incluir, para amarla, porque es la que hace precioso el país en el que vivimos», manifestó.

Además se comprometió a gobernar en favor de la personas más pobres y a luchar porque la personas de la tercera edad tengan condiciones dignas para pasar sus últimos años de vida con acceso a seguridad social, una pensión jubilar y gastos de sepelio cuando sea el caso, porque no es posible que «quienes han trabajado tanto se lleven una deuda hasta la vejez».

Quienes se encontraban en la parte baja de la tarima, en su mayoría adultos mayores y personas con discapacidad, se congratularon con la propuesta y agregaron que nunca antes un gobierno se había preocupado por ellos.

Moreno criticó la postura de algunos dirigentes indígenas que han mostrado su apoyo al candidato de derecha sin consultar con las bases. «No hace nada y se paga a dirigentes y campesinos pero que sepa que todo se puede comprar, menos el corazón de los ecuatorianos», precisó.

Con ese criterio coincidió Anibal Baez, un ibarreño de 75 años, quien manifestó que el país había teñido cambios notorios en los últimos 10 años y que el apoyo que ellos daban al gobierno era real, no como ocurre en el caso del binomio de Lasso, Andrés Páez.

«El día de ayer tuvimos un coideario, Andrés Páez, que pagó a los indígenas para que vengan acá, esto que se ve aquí es porque creemos en el gobierno, nada es pagado», dijo a Andes.

Moreno resaltó los resultados de las últimas encuestas que le dan una ventaja sobre el candidato Lasso, y recordó que el plan de gobierno que maneja el exbanquero prevé privatizar servicios básicos como salud y educación, porque «ve a las personas como clientes y no como seres humanos».

«No vamos a permitir que privatice ni vamos a dejar que se aumenten los precios de la salud. No permitiré que destruya lo que hemos alcanzado juntos» señaló Moreno mientras los asistentes lo aplaudían.

Agregó que se incentivará la mejora en la calidad de los servicios públicos y se cumplirá con uno de los pedidos de los indígenas de volver las escuelas a las comunidades y de promover la educación intercultural bilingüe.

«No ofrezco imposibles, solo ofrezco lo que vamos a poder cumplir» dijo Moreno en Imbabura, donde obtuvo el 43,11% de votos en las elecciones del 19 de febrero.