Nuevos detalles sobre la separación entre Olivia Wilde y Jason Sudeikis han salido a la luz debido a las revelaciones que hizo la niñera de los dos hijos que tuvo la pareja en su matrimonio.

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Entre las revelaciones más destacadas de la mujer están el hecho de que Wilde comenzó a alejarse de su esposo cuando conoció al exmiembro de One Direction.

Pero lo que más ha sorprendido es que la actriz abandonó a su perro labrador para evitar la responsabilidad de cuidarlo tras la separación.

No es novedad que cuando ocurre un proceso de divorcio se señale a las mujeres de «abandono» al matrimonio, al hogar o a la familia. Justamente es lo que ocurre actualmente con Wilde.

En una entrevista con Daily Mail, la niñera aseguró que la productora de ‘Don’t Worry Darling’ dejó a su perro ‘Gordon’ para tener mayor libertad de salir con Styles.

«Después de que se fue, ella vino de visita y dijo: ‘Tenemos que encontrarle a Gordon un nuevo hogar’. A Jason realmente no le importan los animales y lo quería fuera de su casa lo antes posible».

La mujer aseguró que Jason dijo en varias ocasiones que Wilde solo tenía al can por apariencias, ya que no se hacía cargo de la mascota.

Fue enconces cuando ‘Gordon’ terminó en manos de su entrenador, que vive en Nueva York.

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