Los presidentes de Perú Martín Vizcarra, y de Chile, Sebastián Piñera, reafirmaron este jueves 10 de octubre su respaldo a su homólogo de Ecuador, Lenín Moreno, frente a los actos de violencia que vive el país y rechazaron cualquier intento de desestabilizar la democracia.

"Perú y Chile hemos respaldado siempre la democracia y el estado de derecho en el mundo, pero especialmente en nuestro continente". Créditos: EFE

En una declaración conjunta al término del tercer gabinete binacional entre ambos países, Vizcarra y Piñera expresaron su «total apoyo a la democracia y el estado de derecho».

También felicitaron «el esfuerzo por abrir espacios de diálogo y entendimiento de manera de encauzar los requerimientos de las organizaciones sociales a través de vías pacíficas«.

El mandatario chileno añadió que, por ello, también han condenado en reiteradas ocasiones la situación de Venezuela, donde dentro del Grupo de Lima denuncian la ruptura del orden democrático por parte del presidente Nicolás Maduro.

«Manifestamos nuestro total apoyo y respaldo a la democracia y al pueblo de Ecuador», reiteró Piñera junto a Vizcarra, desde el balneario peruano de Paracas, 250 kilómetros al sur de Lima, donde se reunieron para fortalecer los lazos entre los dos países.

A pesar de que el ministro de Relaciones Exteriores, Gustavo Meza-Cuadra, anticipó el martes que estaba prevista ninguna declaración sobre Ecuador durante el encuentro entre los dos gobernantes, esta se produjo con plena sintonía.

Perú ya había manifestado el martes su respaldo a Moreno en un comunicado conjunto con otros países latinoamericanos (Argentina, Brasil, Colombia, Guatemala y Paraguay). Estos países respaldaron todas las acciones del presidente ecuatoriano «para recuperar la paz, la institucionalidad y el orden, utilizando los instrumentos que le otorgan la Constitución y la ley, como lo ha venido haciendo».

Esas naciones responsabilizaron al Gobierno venezolano de Nicolás Maduro de intentar «desestabilizar» las democracias de la región y de tratar de «extender los lineamientos de su nefasta obra de Gobierno». Ecuador vive desde la pasada semana una ola de disturbios y protestas por la cancelación del subsidio a la gasolina, una decisión tomada por Moreno para incrementar los ingresos del Estado y, con ello, satisfacer las demandas del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Esta institución, así como otros organismos internacionales, concedieron recientemente al país a una línea de crédito de más de 10.000 millones de dólares. El plan de Moreno provocó una oleada de manifestaciones y de movilizaciones de distintos sectores de la sociedad ecuatoriana que se ha ido recrudeciendo en las últimas horas.

Fuente: EFE – Aliado estratégico FmMundo