El presidente Rafael Correa, reiteró este viernes el apoyo de su país a la medida adoptada por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) para controlar la caída de los precios petroleros y estimó que con la congelación de la producción el rebote del costo del barril estaría rondando los 200 dólares a mediano plazo.

“Apoyamos la postura de la OPEP, siempre ha sido nuestra postura”, afirmó desde la provincia de Bolívar en una entrevista radiotelevisada.

Al referirse a por qué la OPEP no había hecho “lo obvio”, indicó que nadie le va quitar el convencimiento de que hubo problemas de geopolítica contra Irán, Rusia y “muy probablemente contra Venezuela”. También refirió que aunque su país es el productor más pequeño miembro de esa agrupación de productores, “probablemente por ahí se tomó en cuenta a Ecuador”.

Sin embargo, consideró que “por las declaraciones y por las acciones” se les fue de las manos esta decisión y el precio se desplomó al punto que “la propia Arabia Saudita tiene problemas, tiene déficit fiscal; ha tenido que ajustar el precio de la gasolina, ellos que nunca lo ajustaban”, acotó.

Añadió de que existen “signos muy positivos” que quizás fueron subestimados por la prensa, y es el hecho de se hayan sentado a conversar Rusia, no miembro de la OPEP, y Arabia Saudita, que son rivales en la región.

“Que esos dos países se hayan sentado a conversar es un síntoma y un signo muy positivo que lo ha subestimado cierta prensa” acotó.

También reconoció la disposición de Irán de apoyar las acciones de la OPEP para controlar el precio

Expuso su confianza en que “pronto habrá soluciones a este problema que perjudica a todos en el corto plazo”, y en particular mencionó que ello hará que en el mediano plazo el precio se incremente notablemente.

“Con la destrucción de inversiones que está viviendo el sector petrolero; las torres que por centenas se están perdiendo en Estados Unidos, por ejemplo, de perforación, porque ya no es rentable a tan bajo precio seguir explotando petróleo, hará que en el mediano plazo rebote el precio a 200 dólares”, señaló.

Enumeró que si son tan baratos los combustibles fósiles ya no habrá quién se preocupe -porque ya no es rentable- de buscar energías alternativas para combatir el cambio climático, etcétera, y esto perjudica a todos.

«Entonces mientras más rápido se encuentre un precio de equilibrio, razonable, bueno para productores, bueno para consumidores, mejor para todo el planeta”, acotó.