La capital esmeraldeña analizaba incluso regresar a semáforo rojo, es decir, al confinamiento obligatorio, ante alza de casos de coronavirus.

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Hay preocupación en Esmeraldas, norte del país, por el aumento de casos de COVID-19. A diario se reportan muertes por el virus. El panorama incluso llevó a analizar el retorno del semáforo rojo en la capital esmeraldeña ante el alza y la crítica situación hospitalaria, se dijo. Las medidas vigentes para frenar la pandemia incluso no daban resultados, pues muchos ciudadanos incumplían las disposiciones y se registraban aglomeraciones, bailes y otras actividades consideradas foco de riesgo para la transmisión del virus.

En la sesión del viernes último del COE cantonal de Esmeraldas se optó por mantener el semáforo amarillo para no regresar a un confinamiento obligatorio. Pero se endurecieron las sanciones que se aplicarán y que rigen desde la noche del viernes 12 de marzo.

Entre las sanciones constan la prisión para quienes incumplan las medidas de bioseguridad de prevención, dispuestas por las autoridades.

“Las multas son con base en el artículo 282 del Código Orgánico Integral Penal (COIP), que establece privación de libertad entre 1 a 3 años a quienes realicen fiestas y bailes no autorizados por el COE cantonal, y también a los libadores en espacios públicos”, detalló Betto Estupiñán, secretario del organismo esmeraldeño.

Las cifras oficiales del Ministerio de Salud Pública (MSP) reportaban, hasta el viernes 12 de marzo, 6.354 contagiados y 277 fallecidos confirmados por COVID-19 en la provincia de Esmeraldas.

El cantón Esmeraldas, capital también de la provincia, lidera los contagios en esta jurisdicción, con 3.311 casos. Le sigue el cantón Quinindé con 1.585. Luego, Atacames, con 502; Eloy Alfaro, con 350; Rioverde, con 273; Muisne, con 196, y San Lorenzo, con 137 contagios, según las cifras oficiales.

Además de la prisión, hay sanciones económicas para instituciones.

Así, se multará con una remuneración mensual unificada ($ 400) a los gerentes de las instituciones financieras en caso de que no logren cumplir con estrategias que eviten la aglomeración de usuarios en los exteriores de sus locales.

Lo mismo aplica para quienes vendan bebidas alcohólicas fuera de la franja horaria dispuesta.

También es de cumplimiento obligatorio la desinfección de la transportación de pasajeros, así como el uso de las mascarillas o cubrebocas, indicó Estupiñán.

Desde el 7 de julio de 2020, el cantón Esmeraldas está en semáforo amarillo y en el mismo color sanitario se encuentran los otros seis cantones de la provincia verde.

“La situación económica y laboral en la capital esmeraldeña es deplorable y se agudizó con la pandemia, y por ello el Concejo municipal recomendó medidas más drásticas para evitar el incremento de la pandemia”, puntualizó el concejal Miguel Ruiz.

Comerciantes y emprendedores turísticos pidieron también mantener el semáforo amarillo, expresó Carlos Acosta, directivo de la Cámara de Turismo de Esmeraldas, quien dijo que las economías de estos sectores no se recuperan ni con los feriados.

Las nuevas disposiciones empezaron a cumplirse desde la noche del viernes con la participación de autoridades de control y de la fuerza pública.

Nota Original: El Universo – LINK