Oscar Pérez, agente policial y actor venezolano buscado por las autoridades venezolanas después de haber sobrevolado Caracas en un helicóptero robado de la policía y judicial y lanzar granadas contra varias sedes gubernamentales el pasado martes, reapareció en un video publicado en redes sociales la noche de este martes.

CNN

En este nuevo video, Pérez dice que está en Caracas y anunció que está preparado para activar la segunda fase de su plan.

«Queremos aclarar que las maniobras hechas el 27 (de junio) fueron logradas a la perfección en una primera fase dónde solo hicimos daño a estructuras como el Ministerio de Justicia y el Tribunal Supremo. No hubo daños colaterales porque así fue programado, porque no somos asesinos», afirma.

CNN no puede corroborar que el policía se encuentra en la capital venezolana como afirma en el video.

El piloto explica por que estuvieron ausentes varios días y afirma que han regresado «listos y dispuestos para continuar con nuestra lucha férrea por la liberación de nuestra patria».

Pérez calificó al presidente Nicolás Maduro y al diputado Diosdado Cabello de asesinos.

En el video de más de cinco minutos de duración, Pérez contestó las críticas a sus acciones del martes pasado y envió un mensaje a los manifestantes.

«Mando un saludo fraternal a los muchachos que siguen en pie de lucha. Permanezcamos firmes en las calles, con furia y energía. Estamos defendiendo nuestro futuro, derechos y deberes», dijo Pérez.

La semana pasada, el presidente Maduro calificó las acciones de Pérez como terrorismo y aseguró que el policía es un criminal. El mandatario venezolano también pidió ayuda para encontrarlo.

Pérez es en este momento el hombre más buscado en Venezuela. Las autoridades emitieron orden de captura en su contra y pidió a la Interpol una circular roja. Pérez es el oficial de policía que protagonizó el temerario vuelo en helicóptero sobre Caracas y señalado por el Gobierno de Maduro como un terrorista vinculado a la CIA; pero pocos saben de sus otros pasatiempos que incluyen hasta un debut en el cine.

Según un comunicado del gobierno el día del ataque, se registraron «ataques armados» contra la sede del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y del Ministerio del Poder Popular para Relaciones Interiores, Justicia y Paz como parte de una «escalada golpista contra la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y sus instituciones».

El ministro de Información, Ernesto Villegas, dijo que ambos ataques se efectuaron desde un helicóptero hurtado de una base aérea por el piloto Pérez, inspector del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) y que sobrevoló algunas partes de Caracas.

En las inmediaciones del Ministerio del Poder Popular, el helicóptero «efectuó alrededor de 15 disparos» contra la edificación mientras se celebraba en la terraza «un agasajo a un grupo de comunicadores» con motivo del Día del Periodista, que en Venezuela se celebra el 27 de junio. Había, según el gobierno, unas 80 personas en el lugar.

Posteriormente, el helicóptero fue llevado hacia la sede del TSJ, donde se se efectuaron «disparos y lanzadas al menos cuatro granadas», dos de las cuales fueron lanzadas contra la Guardia Nacional Bolivariana que custodiaba el edificio, dijo Villegas.

Horas antes, el presidente Maduro había emitido una advertencia que retumbó en el país y que para el líder opositor Henrique Capriles se trató de una declaración de guerra.

«Si Venezuela fuera sumida en el caos y la violencia, y fuera destruida la revolución bolivariana, nosotros iríamos al combate […] y lo que no se pudo con los votos, lo haríamos con las armas», dijo el mandatario ante sus seguidores este martes.

Hay pocas cosas claras sobre el ataque: si se trató de un intento para derrocar al gobierno de Maduro, falló de manera espectacular.

Nadie resultó herido y una de las granadas no explotó, según funcionarios del gobierno.

Un día después del ataque las autoridades encontraron el helicóptero en el estado Vargas.