El ministro de la Secretaría de Gobierno de Brasil, Gaddel Vieira Lima, entregó este viernes su carta de renuncia al presidente Michel Temer luego de un escándalo de tráfico de influencias, según informó la agencia de noticias Agencia Brasil.

EFE

En la carta dada a conocer por la agencia estatal de noticias y que fue dirigida a su “fraterno amigo Temer”, el ministro dice es hora de irse luego de que se “engrosaran las críticas” en su contra por su actuación en el Ministerio de la Secretaría de Gobierno.

“Veo el sufrimiento de mis familiares. Los que me conocen saben que ese es el límite de dolor que aguanto”, dice la misiva con fecha del 25 de noviembre. “Es hora de partir”.

“Frente a las dimensiones de las interpretaciones dadas, pido disculpas a quienes hayan sido por ellas alcanzados, pero Brasil es mayor que todo eso», añade.

Su renuncia llega días después de que el exministro de Cultura Marcelo Calero lo acusara de haberlo presionado para que interviniera ante el Instituto del Patrimonio Histórico y Artístico Nacional (IPHAN) para que autorizara la construcción de un edificio de lujo en un área histórica en el centro de la ciudad de Salvador, Bahía, donde Vieira Lima compró un apartamento, según informa Agencia Brasil.

Las declaraciones las dio Calero en una entrevista al diario local Folha de Sao Paulo en las que habló sobre esas presiones. El ministro de la Secretaría de Gobierno admitió en ese medio haber discutido el proyecto con Calero, pero negó haberlo presionado de cualquier manera, añade Agencia Brasil.

La Comisión de Ética Pública de Brasil abrirá un proceso en contra de Gaddel Vieira Lima para investigar su conducta ética.

Vieira Lima dice que luego de su renuncia seguirá siendo un “ferviente partidario del gobierno” que está encabezado por un presidente “serio, ético y amable”. También agradeció el apoyo a los miembros del Congreso por el apoyo y la cooperación que les dieron a las medidas importantes para el país, dice Agencia Brasil.

El político hace parte del Partido del Movimiento Democrático Brasileño, el mismo del presidente Michel Temer. Fue diputado federal del estado de Bahía cinco veces consecutivas y fue ministro de Integración Nacional entre 2007 y 2010 durante el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.

La renuncia de Vieiria Lima se suma a la salida de varios ministros del gobierno interino de Temer en tan solo seis meses.

El pasado 31 de mayo apartó de su cargo el ministro de Transparencia, Fiscalización y Control del gobierno, Fabiano Silveira, luego de que se conocieran conversaciones grabadas en las que Silveira critica la operación anticorrupción del caso Petrobras, conocida como Operación Lava Jato.

Silveira le dijo a Agencia Brasil haber estado “de paso” en la casa del presidente del Senado en el momento de las grabaciones y añadió que no sabía de la presencia de Sergio Machado (responsable de las grabaciones secretas), con quien no tiene ninguna relación personal ni profesional. Él negó haber intervenido en entidades públicas a favor de terceros, dice la nota.

También renunció a finales de mayo Romero Jucá, ministro de Planificación de ese país cuando unas grabaciones revelaron que presuntamente estaba intentando obstruir una investigación federal. Según los audios, Jucá habría conspirado para bloquear una investigación de corrupción. “Tengo la consciencia de que no he cometido ninguna irregularidad y mucho menos cualquier acto contra las investigaciones de la [Operación] Autolavado”, dijo a medios de comunicación al dejar su cargo, citado por la agencia de noticias de Brasil.

En junio dimitió el ministro del Turismo, Henrique Eduardo Alves, a quien se le acusa de haber recibido 444 mil dólares en donaciones electorales procedentes de recursos ilícitos, de acuerdo con información Agencia Brasil, que añade que Alves dijo que renunciaba a su puesto para «no crear desgastes o dificultades para el gobierno interino».

Finalmente, en septiembre, el abogado general de la Unión Fabio Medina Osorio —quien tenía rango ministerial— fue despedido por el presidente Michel Temer. Días después de su renuncia, Medina Osorio le dijo a la prensa que con su partida el gobierno quería tapar la investigación de corrupción de Petrobras conocida como ‘Lava Jato’, según Agencia Brasil. Esas declaraciones fueron desmentidas por su sucesora, Grace Mendonça.

Las renuncias llegan meses después de que Michel Temer fuera nombrado como presidente interino de Brasil en mayo de este año tras la decisión del Senado de iniciar un juicio político a la presidenta Dilma Rousseff.

La mandataria fue acusada de esconder un déficit presupuestario para ganar la reelección en 2014 y sus oponentes la culparon de ser la responsable de la causar la peor recesión del país en décadas.

«No he cometido ninguno de los delitos de los que se me acusa», dijo Rousseff tras su destitución. «Sé que seré juzgada, pero mi conciencia está tranquila. No tengo nada que esconder».