Los equipos rusos que participan en la búsqueda del submarino argentino ARA “San Juan”, desaparecido el 15 de noviembre en el Atlántico Sur con 44 tripulantes a bordo, encontraron un pesquero hundido, informó el sábado 9 de diciembre de 2017 el Ministerio de Defensa en Moscú.

CNN

Un vehículo sumergible localizó los restos a una profundidad de más de 1 000 metros, cita a las fuentes del ministerio la agencia Interfax.

La Armada argentina difundió hoy las imágenes de los indicios que habían sido detectados y que resultaron ser el pesquero hundido y una gran formación rocosa de forma ovalada que por su forma parecía ser el submarino.

El portavoz de la fuerza, Enrique Balbi, mostró un video tomado por un vehículo sumergible teledirigido ruso en el que se observa la roca con incrustaciones. “La forma redondeada de la roca y la longitud suponía que podía llegar a ser el submarino ‘San Juan’.

El mismo no corresponde al submarino”, precisó. El portavoz de la Armada señaló en tanto que el buque estadounidense “Atlantis” intentará hoy visualizar con el vehículo sumergible que lleva a bordo otro objeto detectado en el lecho marino. Y luego se dirigirá más hacia el norte para verificar otro indicio detectado por un buque argentino.

El submarino ARA “San Juan” emitió su última comunicación el 15 de noviembre a las 10:19 GMT (05:19 hora de Ecuador) cuando viajaba desde el puerto de Ushuaia, en el extremo sur argentino, hacia la Base Naval de Mar del Plata, unos 400 kilómetros al sur de Buenos Aires. Antes de desaparecer, el comandante del sumergible, Martín Fernández, había reportado un principio de incendio provocado por un cortocircuito en las baterías de alimentación de energía.

Según dijo, el desperfecto fue ocasionado por el ingreso de agua a través del sistema de ventilación en la nave mientras estaba sumergida. Agencias internacionales detectaron en tanto una explosión ocurrida tres horas después de la última comunicación del submarino, muy cerca de su última posición.

En esa zona, ubicada a 430 kilómetros de las costas patagónicas argentinas y 1 300 kilómetros al sur de Buenos Aires, se lleva a cabo la búsqueda, en la que colaboran Rusia, Estados Unidos y aviones y barcos de otros países.

El área, rastrillada ya dos veces, tiene una superficie de 4 000 kilómetros cuadrados y hacia el oeste tiene profundidades hasta mil metros. La Armada decidió ampliar la zona de búsqueda hacia el norte, en la derrota que habría seguido el submarino rumbo a Mar del Plata.

Fuente: El Comercio