La Unión Europea (UE) mostró su solidaridad con Ecuador tras el terremoto del sábado que causó al menos 77 muertos y 588 heridos, y anunció que el Mecanismo Europeo de Protección Civil para desastres ha sido activado para evaluar el posible envío de ayuda y equipos.

«Ecuador ha sido golpeado por un terremoto mortal que ha causado múltiples víctimas. Nuestros pensamientos están con las víctimas, sus familias y amigos, así como con todas las personas afectadas», expresaron la jefa de la diplomacia comunitaria, Federica Mogherini, y el comisario de Ayuda Humanitaria, Christos Stylianides.

En un comunicado conjunto, mostraron la «plena solidaridad» de la Unión Europea con el pueblo y las autoridades de Ecuador «en este momento difícil».

Ambos explicaron que el Mecanismo Europeo de Protección Civil ha sido activado a petición de las Naciones Unidas para proporcionar experiencia en la evaluación de daños.

«Los estados participantes en el mecanismo están analizando el tipo de apoyo y los equipos que ofrecer», afirmaron Mogerini y Stylianides.

El mecanismo de protección civil facilita la cooperación entre los 34 participantes -los 28 estados de la Unión Europea más Islandia, Montenegro, Noruega, Serbia, Macedonia y Turquía- para ofrecer asistencia a terceros países de cualquier continente que se vean afectados por desastres naturales o humanitarios.

En el pasado el sistema europeo se desplegó en otras ocasiones, como en los terremotos de Chile y Haití o en inundaciones e incendios forestales en varios puntos de Europa y Asia.

Mogherini y Stylianides recalcaron el «trabajo heroico» que desempeñan los equipos de socorro «para salvar vidas en condiciones muy difíciles».

El recuento oficial por el momento apunta a al menos 77 víctimas mortales y cerca de seiscientos heridos como consecuencia del terremoto de 7,8 grados en la escala abierta de Richter que azotó el sábado a las 18.58 hora local (23.58 GMT) el norte de la región costera de Ecuador, y que también causó múltiples daños materiales que aún se evalúan.

El vicepresidente del país, Jorge Glas, en una comparecencia ante los medios de comunicación, remarcó que la cifra de fallecidos podría aumentar debido a los daños generados en la zona afectada.

Tras el desastre, el Gobierno ecuatoriano declaró el estado de emergencia en las provincias de Esmeraldas, Manabí, Guayas, Santo Domingo de los Tsáchilas, Los Ríos y Santa Elena, así como el estado de excepción en todo el territorio nacional.