La alerta cambió las actividades que se realizan a diario en el lugar y quienes se encontraban en el interior debieron evacuar.
Asimismo, cintas de seguridad se colocaron sobre la avenida 10 de Agosto, entre la calle Bogotá y la calle Juan Salinas, un tramo que fue cerrado al tránsito vehicular.
Miriam Hidrovo, quien había esperado su turno durante la mañana y precisamente estaba a poco de llegar a la ventanilla de atención en el interior del IESS, escuchó una «amenaza de bomba».
«Unas personas salieron por un corredor diciendo que había una amenaza de bomba y que debíamos salir. La gente empezó a evacuar, antes sin incidentes», comentó Hidrovo.
Miembros del escuadrón antiexplosivos de la Policía Nacional, junto a canes especializados, acudieron al lugar para realizar una revisión en el sitio y determinar la existencia de un posible artefacto explosivo.
