Las decisiones políticas, el mal manejo financiero y la politización del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), no son los únicos agravantes de la crisis que enfrenta la institución. A esto, se suma un sistema de pensiones diseñado para una población más joven, según dijo en Notimundo Estelar, Augusto de la Torre, coordinador de la Comisión de Reformas al IESS.

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De la Torre indicó que este es el problema más profundo y estructural por el que atraviesa la entidad debió a que, en las últimas décadas, la población ecuatoriana ha ido envejeciendo, lo cual ha provocado que en el país haya cada vez más jubilados en relación a los aportantes afiliados. Además, según De la Torre, cada vez los jubilados tienen una expectativa de vida mayor. “Los parámetros del sistema entraron en colisión con esa realidad demográfica y eso hace que el régimen, incluso si se arreglan las deficiencias administrativas y de gestión, esté inherentemente imposibilitado de cumplir con sus promesas por el cambio demográfico, explicó y agregó que se requiere una reforma legal para adaptar la situación.

Para De la Torre, el sistema, en un sentido actuarial, está quebrado pero, en uno de caja, “todavía no”. Esto, debido a que todavía hay los suficientes recursos para pagar las pensiones lo cual se mantendría si el Gobierno hace una buena gestión. “Va a haber caja para pagar un par de años más”, recalcó.

Además, detalló que el trabajo de la Comisión en estos 4 meses consiste en presentar al Presidente y a la sociedad, una propuesta de reforma legal que dé un sistema de pensión equitativo, eficiente, viable y decente para los siguientes 50 o 100 años.

De la Torre recomendó al Gobierno solucionar los temas administrativos y de gestión, flujos de pagos así como un plan de cancelaciones con el Ministerio de Economía y Finanzas. Agregó que no hay nada más político que la fractura y la ruptura de un sistema pensional. “Si bien, el acuerdo social para llegar a arreglar el sistema tiene cierta tensión, la mayor presión social y política ocurriría  si no se arregla este problema y se evita que en dos o tres años empiecen a haber problemas en el pago de pensiones”, finalizó.

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