Según un estudio desarrollado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia en Ecuador, habrá 1,8 millones de personas más en situación de pobreza por ingresos y se reducirá la clase media en alrededor de 1,1 millones de personas, por los efectos colaterales de la pandemia de COVID-19. Joaquín González-Alemán, representante de UNICEF en el país, explicó que los hogares más afectados son aquellos que tienen niños, niñas o adolescentes.

Créditos: UNICEF

En NotiMundo al DíaJoaquín González-Alemán, representante de UNICEF en el Ecuador, explicó que hasta fin de este año, 3,1 millones de infantes y adolescentes caerán en la pobreza multidimensional por el impacto de la pandemia de coronavirus en el país. Esto significa que sus hogares sufrirán una o más privaciones en educación, salud, alimentación, vivienda, trabajo y seguridad social. González-Alemán advirtió que la crisis tendrá doble impacto, pues además de la disminución de los ingresos de los hogares, se incrementará la desigualdad.

Es por eso que UNICEF insta al Gobierno nacional, al sector privado y a la comunidad internacional a sumar esfuerzos y cooperar para asegurar una reactivación económica inclusiva y equitativa y la educación de los niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad. Además, pide que se invierta en un sistema de protección social sensible a la niñez, cuyo eje de intervención sean las familias.

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