La carrera para la Alcaldía de Quito está en marcha, en medio de la incertidumbre sobre la cantidad de candidatos que se postularán para ocupar el cargo. Wilson Merino, líder del movimiento Imparables, anunció la declinación de su candidatura para promover la unidad de los movimientos de centro izquierda.

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En Notimundo al Día, Wilson Merino, líder del movimiento Imparables, aseguró que la capital ha pasado durante los últimos 15 años por una profunda crisis económica, política y social, que han perdido el rumbo de hacia dónde debe ir la ciudad. Recordó que, junto con el movimiento Imparables, hace un año se buscó resignificar a la política mediante la construcción de nuevos liderazgos, pero pese a contar con cerca de 200.000 firmas y 30.000 adherentes, no se logró inscribir la tienda política para las elecciones seccionales de 2023.

Merino indicó que durante las próximas semanas se concluirá la recolección de firmas para los futuros procesos electorales, pero recalcó la decisión de no ser la tienda política que lidere el proceso de cambio que requiere Quito. Sostuvo que esto se lo acordó con un sentido de responsabilidad, puesto que para las elecciones no puede presentarse a una sola persona, sino a todo un equipo conformado por concejales, juntas parroquiales, entre otros actores.

El activista social alertó que, ante el escenario similar al de 2019 que se presenta durante estos comicios, donde al momento suenan de 12 a 15 precandidatos, existirá una falta de legitimidad en la máxima autoridad electa, además de la falta de gobernabilidad que tendrá con el Concejo Metropolitano. Ante este panorama, anunció la decisión de declinar a la candidatura para la Alcaldía, con el fin de promover la unidad de los movimientos de tendencia centro izquierda, para resolver los problemas de la ciudadanía, como la falta de empleo y el propio Metro de Quito, que estaría operando a finales de 2022.

En este sentido, hizo un llamado «a la sensatez, coherencia y unidad», para unir esfuerzos y presentar un cuadro y un equipo que vaya de acuerdo a las necesidades de la ciudadanía, con soluciones a mediano y largo plazo. «Desde la asamblea de Imparables, decidimos apoyar la unidad de las organizaciones de nuestra tendencia», añadió, al tiempo que aclaró que todavía no está definido el apoyo a una persona en específico, pero lo primordial será pensar en los intereses comunes y no políticos. «No se trata del nombre, sino del proyecto», acotó.

Manifestó que es necesario que se vuelquen los ojos a la ruralidad, para aliviar los problemas de la población que ha sido desatendida por varias administraciones municipales. Además, propuso que se debe evaluar la posibilidad de dividir por jornadas a los funcionarios municipales, que son cerca de 22.000, para ampliar los horarios de atención y agilizar los trámites, además de promover la reactivación de los negocios del Centro Histórico.

Finamente, recalcó que es necesario «menos candidatos para darle más alternativas efectivas a la ciudadanía».

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