“Se trató de un hecho aislado, provocado por internos que pretenden retomar las viejas prácticas del sistema de rehabilitación social, en donde eran los internos quienes tenían el control de los centros y no el Estado. Nosotros como Gobierno no permitiremos que estas viejas prácticas vuelvan a darse en el sistema penitenciario”, sostuvo Benítez.
Al momento se investiga la presunta participación de 10 internos en el acto indisciplinario, quienes fueron puestos a órdenes de las autoridades judiciales correspondientes. Benítez indicó que varios involucrados en este hecho fueron trasladados a distintos centros de privación de libertad para evitar que se vuelvan a suscitar incidentes similares.
Por su parte, Juan Cristóbal Lloret, gobernador del Azuay, señaló que el Gobierno Nacional está empeñado en que se desarrolle un proceso de rehabilitación igualitario para todas las personas que cumplen internamiento. Destacó la inversión que se hace en infraestructura para los centros de rehabilitación social.
La tarde del 14 de mayo, se habría generado una riña en uno de los pabellones del centro penitenciario, hecho que dejó como resultado la muerte del interno, además de otras siete personas privadas de libertad heridas. Una de ellas permanece internada en una casa de salud.