A medida que los bomberos canadienses intentan controlar los 400 incendios forestales alrededor del país, el humo continúa extendiéndose por toda la parte este de Norteamérica alcanzando incluso a Noruega.
Las escuelas públicas de Nueva York cancelaron todas las actividades al aire libre y el alcalde de la ciudad pidió a los ciudadanos que limiten sus actividades en el exterior. Asimismo, las autoridades recomendaron el uso de mascarilla como medida de protección .
Según la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, más de 111 millones de personas se vieron afectadas por alertas de calidad del aire en gran parte del noreste estadounidense.
Los expertos canadienses señalan que los intensos incendios responden a una primavera más cálida y seca de lo normal. Se prevé que estas condiciones se mantengan durante todo el verano por lo cual las autoridades de Canadá dicen que el país se prepara para la peor temporada de incendios forestales de la que se tenga registro.