Se trata de casas de hormigón armado, cubiertas metalizadas, acabados de calidad, conexiones para cocinas de inducción, dos dormitorios, cocina sala y comedor. Además, hay áreas verdes y todos los servicios básicos, recalcó el presidente Rafael Correa durante la ceremonia de entrega formal de la obra.
Las familias empezaron a mudarse a esta urbanización- para la que se invirtió 2,9 millones- a principios del mes de enero. «
Nosotros antes vivíamos en la ribera del río, donde asumíamos mucho riesgo, con miedo de salir a nuestros trabajos y que al volver los hijos mayores nos dijeran que el más pequeño se cayó (al río)», señaló Alexandra Betancur, en representación de los beneficiarios, durante el evento. Ellos han denominado al reasentamiento Ciudadela Bendición de Dios.
Betancur agradeció al Gobierno la obra que ahora le permite vivir con más tranquilidad y seguridad. «Muchos se sienten orgullosos de estar aquí, ahora podemos pisar con firmeza y salir al trabajo y que los hijos mayores al volver nos digan que el más pequeño está dormido».
La moradora dijo que todos están comprometidos a «cuidar nuestras casas, nuestra ciudadela». En su intervención, el presidente Rafael Correa explicó que el sector de El Manglar – donde vivían las familias ahora reubicadas- fue declarado en emergencia en 2013 por las constantes inundaciones.
El Mandatario expuso que para el Gobierno la seguridad de cada ciudadano es prioridad. «No podemos continuar con la informalidad como norma. A acabar con las invasiones», instó.
Correa dijo que en 9 años 340 mil familias en todo el país accedieron a vivienda digna y segura. Solo en la provincia de Esmeraldas, según datos del Ministerio de Vivienda, se invirtió $ 4’596.013 en 2015 para la ejecución de diversos proyectos.