En el límite entre estos dos cantones, el río Dumarí arrasó con todo, incluso se llevó parte de una carretera que unía a 6 comunidades netamente agrícolas, ganaderas y lecheras.
Mientras que en Buenavista un puente carrosable se destruyó por la fuerza del río Casacay, allí una comunidad quedó aislada.
“Desde el fin de semana las lluvias han sido fuertes, esto no sucedía desde hace 22 años, ahora el río se ha llevado parte de la carretera”, dijo Juan Cajamarca, habitante del sector Playas de Ducay.
Los lugareños improvisaron un puente de caña y tabla para poder cruzar, incluso hubo algunos que arriesgaron su vida e intentaron cruzar con una soga. «Las lluvias han sido fuertes y nos dejan graves daños en las vías. Las pérdidas son incalculables» indicó Hernán Yupangui, alcalde de Chilla.
Los agricultores comentan que la crecida del río fue tanto que se abrió paso entre los cultivos, arrastrando no solo palos y piedras, sino también los patios traseros de algunas viviendas. «Tenía 40 chanchos y todos se los llevo el río, además de herramientas y mangueras. Mi hermano tiene arriba la pollera con 10 mil pollos y no puede cruzar para ir a alimentarlos.
El río se llevó la carretera y hasta un pedazo de mi plantación», explicó Lidia Aguilar, otra de las afectadas. Porfirio Rodríguez, dueño de una granja de pollos, dijo que luego de las fuertes lluvias, sus pérdidas ascienden a unos 3 mil pollos; el sistema de agua también colapsó.
Comité de Operaciones Emergentes (COE) de Pasaje y Chilla, sigue activado para brindar la ayuda necesaria a los afectados.