El barco científico de esa sociedad, denominado Argo, inició su recorrido el 3 de diciembre por las aguas de la isla Santa Cruz, de Galápagos, bajo el mando del Doctor en Ecología Marina y director del proyecto Pristine Seas (Mares Pristinos) de National Geographic, Enric Sala.
La expedición tiene el objetivo primario de investigar los ecosistemas marinos de Galápagos, a fin de mostrar pruebas de su riqueza al mundo en un documental de una hora de duración.
El proyecto cuenta con el apoyo de los Ministerios de Ambiente y de Turismo de Ecuador y, según manifestó Sala a medios de prensa poco antes de partir, sus colegas y él preveían llegar a montañas submarinas donde nadie ha bajado todavía y encontrar especies nuevas.
Los expertos de National Geographic consideran que aún el mundo y los propios ecuatorianos desconocen gran parte de la riqueza submarina extraordinaria de las Galápagos, sitial declarado Patrimonio de la Humanidad en 1978 por la Unesco.
Para la misión disponen, además del barco científico Argo, de cámaras remotas de profundidad, de descompresión, equipos cinematográficos apropiados para profundidades marinas y un submarino capaz de descender hasta 450 metros de profundidad, entre otros.
National Geographic financia por completo la expedición y manifestó su interés de poner el documental a disposición de todas las entidades educativas del país suramericano, cuando esté listo, probablemente a mediados del año próximo.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, canceló el pasado 17 de diciembre una visita al equipo de esa sociedad, por los peligros del viaje, pero deseó suerte a la expedición mediante su cuenta en la red social Twitter.