Figueredo, quien es juzgado por presuntos delitos de estafa y lavado de activos durante el periodo en que estuvo al frente de la Conmebol, fue internado ayer.
Figueredo llegó el jueves extraditado desde Suiza para declarar en el juzgado de Crimen Organizado acusado de estafa y lavado de dinero.
«Sus problemas de salud están certificados y van a ser valorados por un médico forense, pero prefiero no manejarlos públicamente por respeto a su familia», dijo el jueves la abogada Karen Pintos, quien pidió en vano la prisión domiciliaria para su cliente.