A partir del pasado jueves 14 de enero, el Mercado de Valores trabaja con un nuevo recurso, los llamados Títulos del Banco Central (TBC). Estos son una alternativa que ofrece el Ministerio de Finanzas para que acreedores impagos cobren sus deudas con el Estado y, a la vez, paguen tributos pendientes.

La oferta de los Título del Banco Central (TBC), extendida por el Ministerio de Finanzas, sirve para los acreedores impagos, como constructoras, municipios, etc., cobrar sus deudas con el Estado ecuatoriano y, al mismo tiempo, poder pagar sus impuestos pendientes. Existen dos opciones de uso para quienes reciban estos títulos: entregarlos directamente al Servicio de Rentas Internas (SRI) para liquidar el pago de impuestos pendientes o negociarlos en la Bolsa de Valores, si lo que necesitan es liquidez.

Los TBC no podrán ser adquiridos por inversionistas, sino únicamente por empresas que tengan pagos pendientes con el SRI. Además, no generan ningún interés.

El beneficio para los acreedores del Estado está en que obtienen liquidez para su operación. Hasta el momento, se han vendido entre 2% y 3% por debajo de su precio, es decir, al 97% o 98% de su valor nominal. Sin embargo, el comprador puede pagar con esos papeles al 100% de su valor los montos pendientes con el SRI.

La Bolsa de Valores de Quito (BVQ) negocia, desde inicios de 2016, los Títulos del Banco Central (TBC). Mónica Villagómez, presidenta del Directorio de la BVQ, durante un conversatorio con medios de comunicación, dijo que «escogieron al mercado bursátil (para la negociación), porque les ofrece las condiciones de equidad, competencia y transparencia». Además, explicó que la emisión e inscripción de los TCB, realizados el pasado 8 de enero, cumplen el artículo 126 del Código Orgánico Monetario. «La Junta de Política y Regulación Monetaria y Financiera, con el voto unánime de sus miembros, autorizará al Banco Central del Ecuador (BCE), dentro de los límites de sostenibilidad de la balanza de pagos, la emisión de Títulos del Banco Central (TBC), que serán de renovación automática y respaldados en su totalidad con los activos del BCE», indicó.

El monto de los TBC es de 200 millones de dólares, los cuales ya han sido inscritos en el catastro público del Registro del Mercado de Valores en la Superintendencia de Compañías y de Valores y, según Villagómez, a pedido del Estado, han sido colocados en las Bolsas de Valores. Según la normativa, estos valores también pueden ser colocados de forma directa o por medio de una subasta. Villagómez comentó que las negociaciones deben hacerse con un intermediario, en este caso una Casa de Valores, para que el proveedor pueda colocar o acceder a un TBC. La única excepción será con el mercado primario, con la que podrá ser de forma extrabursátil.