El Gobierno de México anunció la detención en el noroccidental estado de Sinaloa de Francisco Javier Hernández García, líder del cártel de los Beltrán Leyva y uno de los 122 objetivos prioritarios del país.

«Líneas de investigación señalan que tras la detención de Héctor Beltrán Leyva, el pasado 1º de octubre de 2014, Hernández García asumió el mando de este grupo delictivo», destacó en un mensaje a medios el comisionado nacional de Seguridad, Renato Sales.

La detención fue llevada a cabo el sábado pasado en el municipio de Guasave, en Sinaloa, por un operativo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Policía Federal, y en él también se detuvo a su presunto colaborador Francisco Javier Martínez Coronado.

Con la captura de Francisco Javier Hernández García, de 47 años, son ya 99 los detenidos de los 122 prioritarios del Gobierno mexicano, destacó Sales.

«A los hoy detenidos les fueron aseguradas dos armas largas, dos cortas, así como un vehículo, una bolsa con pastillas, al parecer metanfetamina, y un envoltorio que contenía una sustancia con las características de droga sintética», añadió el titular de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS).

Los presuntos responsables y lo incautado fueron puestos a disposición del Ministerio Público, adscrito a la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada.

Según relató Sales, Hernández García, alias «el 2000», inició sus actividades delictivas en la década de los 90 como escolta de los integrantes del círculo familiar de los hermanos Beltrán Leyva.

En esa actividad, logró la confianza del capo Arturo Beltrán, por lo que en 2005 fue asignado como uno de los operadores para el paso de droga en el estado de Sonora (norte de México) y para ello creó diferentes subgrupos en los municipios fronterizos del estado, para intentar controlar el trasiego de droga hacia Estados Unidos.

Antes de asumir el liderazgo de la banda, Hernández García fue «el encargado regional de la estructura del grupo delictivo en Coahuila, San Luis Potosí, Chihuahua y Sonora, además de establecer alianzas con otros grupos de la delincuencia organizada», remarcó Sales.

El cartel de los Beltrán Leyva apareció en 2008 como una ruptura del cártel de Sinaloa tras el arresto de Alfredo «el Mochomo» Beltrán Leyva, debido a lo que ellos consideraron que fue una traición de Joaquín «el Chapo» Guzmán, quien fue arrestado por tercera vez este enero tras fugarse en julio de 2015 de un penal de máxima seguridad.

Los Beltrán Leyva se aliaron con otros carteles que habían sido acérrimos enemigos del cártel de Sinaloa, como son el del Golfo y Los Zetas.

Desde 2010, el cártel de los Beltrán Leyva es una organización severamente golpeada por el Gobierno y sus integrantes han caído paulatinamente tanto en operativos oficiales como en enfrentamientos con sus adversarios, principalmente del cártel de Sinaloa.