Malala intervino brevemente en la conferencia de donantes que se celebra en Londres, destinada a recaudar fondos para atender las necesidades humanitarias de los refugiados y ayudar a los países de la región que los reciben.
La joven paquistaní, que vive en el Reino Unido, dijo que no puede aceptar que se llame «generación perdida» a los pequeños que han huido del conflicto armado en Siria.
«El futuro de Siria depende de los niños y el futuro de estos depende de vosotros», afirmó Malala en la sesión dedicada a los problemas de educación de miles de niños que viven en campos de refugiados en Jordania, Turquía y el Líbano.
La joven relató su visita a un campo de refugiados en el Líbano, donde había una sola escuela pero ya está repleta de libros.
«Decir que es una generación perdida es equivocado. Ellos estarán perdidos si vosotros los abandonáis», insistió Malala, que pidió el aporte de un dólar al día por cada niño para su escolarización.
Las delegaciones de unos 70 países y representantes de organizaciones no gubernamentales (ONGs) han intervenido en los distintos grupos de trabajo y reuniones plenarias, que han estado acompañadas por vídeos sobre el sufrimiento de la población siria.