Rodeado de fans emocionados de todo el mundo, Elton John brindó ayer en Estocolmo, Suecia, su concierto de despedida, con el que puso fin a medio siglo en los escenarios con su Farewell Yellow Brick Road Tour.
Saben cuánto me gusta tocar en vivo. Tocar para ustedes ha sido mi razón de vivir y ustedes han sido absolutamente magníficos”, declaró la estrella de 76 años ante el público que abarrotó el estadio Tele2 Arena, por segunda fecha consecutiva.
Vestido con un frac acentuado por brillantes y sus características gafas rojas de gran tamaño, Elton John se sentó al piano después de las 20 horas locales entre los vítores de los 30 mil asistentes y abrió el recital con uno de sus temas más populares Bennie and the Jets.
Siguió con Philadelphia Freedom, un tema que cautivó a la audiencia y con la que la saludó.
Buenas noches, Estocolmo. Bueno, esto es todo. Estoy muy contento de estar en Suecia y en este hermoso país para terminar nuestra gira Farewell Yellow Brick Road, así que será mejor que sea un buen espectáculo. Aquí vamos”, comentó antes de dar pie a I Guess That’s Why They Call It The Blues.
Poco después de tocar Border Song, que dedicó a Aretha Franklin, el cantante puso al público de pie con su rendición de I’m Still Standing, que quedó cautivado con Tiny Dancer, Have Mercy On The Criminal y Rocket Man.
Desde luego no pudo faltar Candle In The Wind, el tema que cantó en el funeral de la princesa Diana de Gales en 1997 y que adaptó para la ocasión.
Luego de un breve intervalo, reportó el diario The Guardian, el músico apareció en escena con un saco blanco con brillantes en la solapa que combinaban con lentes de sol azules.
Durante más de dos horas, en las que interpretó 23 temas y tuvo cuatro cambios de vestuario, intercaló canciones con momentos en que el artista, levantándose del piano, miraba al público para agradecer a sus seguidores, así como a sus músicos y equipo, algunos de los cuales lo acompañan desde hace más de 40 años.
Quiero rendir homenaje a estos músicos”, expresó. “Son realmente increíbles... y son los mejores”, y así cerró el set con Saturday Night’s Alright for Fighting.
Luego de una salida en falso y los gritos de la multitud, Elton volvió al escenario cuando apareció Chris Martin, el vocalista de Coldplay, en una de las pantallas.
Queremos decirte de todos nosotros, todos los artistas que has amado, inspirado y ayudado: te amamos mucho, estamos muy agradecidos por todo lo que has hecho por nosotros”.
Martin también reconoció la labor de su connacional por su lucha contra el sida a través de su fundación, el apoyo a la comunidad LGBTQ+ y el equipo con su compositor de muchos años, Bernie Taupin. “Te queremos mucho, feliz jubilación y te vamos a extrañar mucho”, agregó el músico, quien tocaba con su banda, en ese momento, en Gotemburgo, al oeste de Suecia.
Luego de Cold Heart, su tema con Dua Lipa, y antes de la canción final Goodbye Yellow Brick Road, agradeció a sus fans.
"No tienen idea de lo mucho que eso significa para mí. He tenido la carrera más maravillosa, más allá de lo imaginable. Cincuenta y dos años de pura alegría tocando música, ¿qué tan afortunado soy de tocar?"
"Pero no estaría sentado aquí si no fuera por ustedes. Compraron sencillos, discos y CD y, lo que es más importante, compraron entradas para los conciertos y saben cómo me encanta tocar en vivo".
"Nunca los olvidaré. He tocado tantos conciertos, ¿cómo podría olvidarlo? Están en mi cabeza, en mi corazón y en mi alma, y se los agradezco mucho”.
"Nunca volveré a estar de gira”, relató el diario británico, pero añadió que podría hacer “algo único” en el futuro, pero “a millas de distancia”.
La gira, con la que dio 330 conciertos en Europa, Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos, Canadá y Reino Unido, inició en 2018, pero fue interrumpida por la pandemia y su operación de cadera en 2021.
Lee la nota original aquí.
Rodeado de fans emocionados de todo el mundo, Elton John brindó ayer en Estocolmo, Suecia, su concierto de despedida, con el que puso fin a medio siglo en los escenarios con su Farewell Yellow Brick Road Tour.
Saben cuánto me gusta tocar en vivo. Tocar para ustedes ha sido mi razón de vivir y ustedes han sido absolutamente magníficos”, declaró la estrella de 76 años ante el público que abarrotó el estadio Tele2 Arena, por segunda fecha consecutiva.
Vestido con un frac acentuado por brillantes y sus características gafas rojas de gran tamaño, Elton John se sentó al piano después de las 20 horas locales entre los vítores de los 30 mil asistentes y abrió el recital con uno de sus temas más populares Bennie and the Jets.
Siguió con Philadelphia Freedom, un tema que cautivó a la audiencia y con la que la saludó.
Buenas noches, Estocolmo. Bueno, esto es todo. Estoy muy contento de estar en Suecia y en este hermoso país para terminar nuestra gira Farewell Yellow Brick Road, así que será mejor que sea un buen espectáculo. Aquí vamos”, comentó antes de dar pie a I Guess That’s Why They Call It The Blues.
Poco después de tocar Border Song, que dedicó a Aretha Franklin, el cantante puso al público de pie con su rendición de I’m Still Standing, que quedó cautivado con Tiny Dancer, Have Mercy On The Criminal y Rocket Man.
Desde luego no pudo faltar Candle In The Wind, el tema que cantó en el funeral de la princesa Diana de Gales en 1997 y que adaptó para la ocasión.
Luego de un breve intervalo, reportó el diario The Guardian, el músico apareció en escena con un saco blanco con brillantes en la solapa que combinaban con lentes de sol azules.
Durante más de dos horas, en las que interpretó 23 temas y tuvo cuatro cambios de vestuario, intercaló canciones con momentos en que el artista, levantándose del piano, miraba al público para agradecer a sus seguidores, así como a sus músicos y equipo, algunos de los cuales lo acompañan desde hace más de 40 años.
Quiero rendir homenaje a estos músicos”, expresó. “Son realmente increíbles… y son los mejores”, y así cerró el set con Saturday Night’s Alright for Fighting.
Luego de una salida en falso y los gritos de la multitud, Elton volvió al escenario cuando apareció Chris Martin, el vocalista de Coldplay, en una de las pantallas.
Queremos decirte de todos nosotros, todos los artistas que has amado, inspirado y ayudado: te amamos mucho, estamos muy agradecidos por todo lo que has hecho por nosotros”.
Martin también reconoció la labor de su connacional por su lucha contra el sida a través de su fundación, el apoyo a la comunidad LGBTQ+ y el equipo con su compositor de muchos años, Bernie Taupin. “Te queremos mucho, feliz jubilación y te vamos a extrañar mucho”, agregó el músico, quien tocaba con su banda, en ese momento, en Gotemburgo, al oeste de Suecia.
Luego de Cold Heart, su tema con Dua Lipa, y antes de la canción final Goodbye Yellow Brick Road, agradeció a sus fans.
«No tienen idea de lo mucho que eso significa para mí. He tenido la carrera más maravillosa, más allá de lo imaginable. Cincuenta y dos años de pura alegría tocando música, ¿qué tan afortunado soy de tocar?»
«Pero no estaría sentado aquí si no fuera por ustedes. Compraron sencillos, discos y CD y, lo que es más importante, compraron entradas para los conciertos y saben cómo me encanta tocar en vivo».
«Nunca los olvidaré. He tocado tantos conciertos, ¿cómo podría olvidarlo? Están en mi cabeza, en mi corazón y en mi alma, y se los agradezco mucho”.
«Nunca volveré a estar de gira”, relató el diario británico, pero añadió que podría hacer “algo único” en el futuro, pero “a millas de distancia”.
La gira, con la que dio 330 conciertos en Europa, Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos, Canadá y Reino Unido, inició en 2018, pero fue interrumpida por la pandemia y su operación de cadera en 2021.
Lee la nota original aquí.