El pasado fin de semana el Instituto Geofísico reportó flujos piroclásticos, tremores, bloques incandescentes y caída de ceniza en varias poblaciones aledañas al volcán Tungurahua. Celeste Arias, directora distrital del MIES en Tungurahua, indicó que se dispuso la ejecución de los planes de contingencia a nivel institucional y en todas las unidades de atención, especialmente en los Centros Infantiles del Buen Vivir (CIBV) de las parroquias donde se ha notado la presencia de ceniza volcánica.
Arias señaló que se realizaron recorridos por poblaciones como Chacauco y Pillate, y se mantuvo diálogos con sus pobladores a fin de recordar las medidas de prevención que deben ser tomadas en cuenta en caso de un evento mayor.
Martha Freire, responsable de la unidad de Gestión de Riesgos del MIES, señaló que el albergue temporal en el cantón de Pelileo se encuentra totalmente operativo, con capacidad de recibir a 77 personas. “Contamos con literas, cobijas, almohadas, un kit completo de cocina, comedor, material de limpieza, etc; que puede ser utilizado inmediatamente si se presenta una emergencia por la actividad del volcán”, enfatizó.
Lira Villalva, gobernadora de Tungurahua, informó que una vez que se conoció el informe entregado por el Instituto Geofísico, se tomaron varias resoluciones como la activación del Sistema de Alerta Temprana (SAT) con mensajes de advertencia por la caída de ceniza.
La Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR) resolvió elevar el nivel de alerta amarilla a naranja en la zona de influencia del volcán con el objetivo de minimizar los efectos de la actividad del volcán. Este cambio de alerta se tomó en base a los informes del Instituto Geofísico, encargado de monitorear la actividad del volcán Tungurahua.