La actriz y cantante Ariana Grande, de 31 años, mantiene su extenuante gira de prensa para la película Wicked, a pesar de las crecientes preocupaciones sobre su estado de salud y su aparente pérdida de peso.
Fuentes cercanas al proyecto han revelado la profunda inquietud de su pareja, Ethan Slater, sobre su bienestar físico y emocional.
Durante un evento de la Fundación SAG-AFTRA en Nueva York, Grande participó en una proyección y sesión de preguntas y respuestas, aparentemente en buena disposición.
Luciendo con un vestido negro holgado y un abrigo de ante vegano negro que dejó caer sobre sus brazos, la artista presentó una imagen que ha generado numerosos comentarios en las redes sociales y entre sus seguidores.
Un informante cercano a la producción declaró exclusivamente a Daily Mail: “Ethan está preocupado por ella, pero se siente impotente”.