“Estoy seguro que no tiene nada que ver en los supuestos escándalos de los que se lo acusa, pero si lo quieren interrogar, que lo hagan con el debido proceso”, mencionó el Presidente, durante su informe de actividades.
Hace pocos días, la policía brasileña llegó a la casa de Lula en São Bernardo (a 20 kilómetros de São Paulo), la registró y se lo llevó a declarar por supuestos casos de corrupción.
Durante tres horas, el expresidente fue interrogado sobre su presunta participación en casos de corrupción que involucra a la petrolera estatal Petrobras.
“Todo nuestro abrazo y respaldo solidario a Luiz Inácio Lula da Silva”, reiteró el Mandatario.